Sindicales

17/2/2017

Mendoza: Raquel Blas vuelve a su escuela

Senador Provincial


En el día  de hoy, la compañera Raquel Blas ha vuelto a su puesto de trabajo en una humilde escuela del barrio La Estanzuela de Godoy Cruz. Este hecho no ha pasado inadvertido para la prensa masiva, ni para los trabajadores de la provincia.


 


Raquel vuelve a la escuela, como ella misma lo definió, “con alegría, porque no tiene nada de malo que un dirigente sindical vuelva a su trabajo, no debería sorprender, debería ser lo normal. Las licencias gremiales no son un privilegio, (son) simplemente un cambio de tareas para la dedicación exclusiva en la actividad del gremio”.


 


Bajo ningún punto de vista se trata de “su retirada de la actividad sindical y política”. Por el contrario, vuelve a su lugar de trabajo como parte de la política establecida por la Agrupación ATE en Acción–Lista Naranja de recomponer la organización sindical de base para enderezar el rumbo de ATE. La palabra tiene su valor, pero las acciones mucho más.


 


Las licencias gremiales de Cornejo


 


Raquel, al igual que un sinnúmero de dirigentes sindicales, es víctima de la política rabiosamente antiobrera de Macri – Cornejo, que pretenden hacer retroceder la capacidad de lucha de las organizaciones obreras. En este punto, ATE es el principal objetivo.


 


El gobernador Alfredo Cornejo habilitó el pedido unilateral, ilegal y autoritario del secretario general de ATE, Roberto Macho, de dar de baja las licencias gremiales a la mayoría opositora del consejo directivo provincial. No se trata simplemente de una devolución de favores por cerrar una pauta “testigo del 17% (12,5 real) y entregar las luchas de troles y el zoo. Se trata de la injerencia directa del Estado patronal en la vida del gremio.


 


Raquel podría haber optado por presentar permisos diarios u otros mecanismos para no volver a la escuela. Esta opción fue descartada. Más aún, Raquel debió intimar al gobierno para que firmara toda la documentación y de esa forma poder presentarse a tomar servicio en su escuela. Para los clasistas, como Raquel, volver a los lugares de trabajo es la tarea que se desprende de la comprensión de que la expulsión de la burocracia es una tarea que requiere reforzar la organización gremial de base. Como Raquel, los compañeros de la mayoría de la comisión administrativa están volviendo a sus lugares de trabajo.


 


El sector minoritario de ATE que usurpa la conducción con apoyo del gobierno es repudiado en los lugares de trabajo porque empieza a mostrar abiertamente que empieza a jugar el rol de peón de Cornejo.


 


Pretenden desactivar la historia y la memoria de los estatales mendocinos de un ATE que no se arrodillaba frente a ningún gobierno, del ATE que rompía techos salariales, del que pasaba a planta a los compañeros, del ATE de las paritarias abiertas, del de las asambleas y delegados, del ATE que todo estatal estaba orgulloso de tener y era envidia del movimiento obrero de Mendoza.


 


Luchar por la dirección del gremio desde los puestos de trabajo


 


Las muestras de adhesión y apoyo a Raquel crecen. En su escuela fue recibida cálidamente por las autoridades, así como por nuevas compañeras que apenas la conocen por los medios. Los pedidos de que vaya a tal o cual repartición no hacen más que multiplicarse.


 


La lucha que sacude a ATE opone a quienes quieren profundizar un ATE clasista y quienes pretenden ser los peones del Estado patronal y el gobierno en el sindicato.


 


Entramos en una nueva etapa de la lucha por recuperar el curso del combativo ATE Mendoza.