Sindicales

1/6/2017

Mientras echa trabajadores en el INCAA, Avelluto vota en las elecciones de UPCN

La sociedad del gobierno y la burocracia sindical


"A confesión de partes, relevo de pruebas", dice el viejo refrán popular. En este caso, es aplicable en toda su plenitud a la votación del ministro de Cultura Pablo Avelluto en la mesa electoral de UPCN, que este jueves 1 lleva adelante su elección gremial en la Junta Interna de Cultura (elección con lista única).


 


Mientras cumplía con el acto "sindical", Avelluto despedía a tres trabajadores del Instituto de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) luego de prometer a la comunidad audiovisual que no habría cesantías durante las movilizaciones de abril. A pesar de esto, y como si no fuera parte de la patronal estatal debido a su cargo -el máximo- en el ministerio de Cultura, Avelluto se presentó a votar como cualquier trabajador más.


 


Se trata del reconocimiento societario de la burocracia sindical de Andrés Rodríguez con sus mandantes estatales. En este caso, Avelluto que, como el resto de los ministros, aplica la paritaria a la baja firmada entre UPCN y el gobierno (20 por ciento en cuotas) que, además, incluye cláusulas precarizadoras. Rodríguez, un burócrata que posee haras de caballos de raza (por lo que ha sido bautizado como "El Centauro"), es tan ajeno a la clase trabajadora como Avelluto, que ni bien comenzó su gestión echó personal de su ministerio y en la Biblioteca Nacional.


 


Este pequeño texto comenzó con la apelación a un refrán popular. Vale cerrarlo con otro: para describir la caducidad de la burocracia sindical a la que pertenece Andrés Rodríguez, "una imagen vale más que mil palabras".