Los médicos residentes del Hospital Madariaga comenzaron el jueves un paro por tiempo indeterminado, cansados ya de esperar una respuesta a los reclamos que vienen realizando desde hace más de tres meses, por el pago de los haberes adeudados y una mejora salarial.

Las condiciones en las que trabajan estos profesionales son de extrema gravedad, la jornada laboral es de más de 14 horas y las guardias que deben cumplir superan las 36 horas. La remuneración promedio que perciben es de 10 pesos por hora, sumando a que no cuentan con el mínimo descanso establecido por ley.

Este régimen de explotación tiene como escenario, aunque se replica en los demás hospitales, al hospital más importante de la provincia, que si bien cuenta con una gran infraestructura, los recursos humanos son muy limitados. Los pocos médicos de planta no dan abasto, por lo que la atención es sostenida en un 80% por los residentes.

Al conocerse la medida, el Ministerio de Trabajo intimó a los profesionales con una trucha conciliación obligatoria, con el único objeto de apretar a los trabajadores para que no paren y así patear el conflicto hasta después de las elecciones. Un dato no menor: el actual ministro de Salud Oscar Herrera Aguad es el vicegobernador electo de Passalacqua, que pasó por el hospital luego de comenzado el conflicto, pero escapó cuando los residentes se acercaron para hablar con él.

La lucha por el pago de los haberes adeudados y el pago de un salario no menor a 12.000 pesos comenzó con una gran de adhesión, no menor al 90% y pasado un día de lucha, logró que se sumen la totalidad de los residentes y también los médicos de Oberá, y pronto lo harán los de Eldorado. Esta provincialización del conflicto muestra el nivel de precarización laboral de los profesionales de la salud.

El proceso de lucha se afianza con la firme decisión de estos trabajadores de seguir adelante con el conflicto y de llevarlo a la calle. Para la semana que se inicia están previstas distintas actividades, como volanteadas en la plaza principal y una gran marcha, con presencia de delegaciones del interior, al Ministerio de Salud, para el miércoles.

Desde el Partido Obrero apoyamos enérgicamente el reclamo y llamamos a todos los estatales y a la comunidad en general a sumarse a la lucha por un salario igual al costo de la canasta familiar, el cese de la precarización laboral, por el pase a planta de todos los contratados.

Si ganan los médicos residentes, ganamos todos.