Sindicales

27/6/1996|500

Movilización masiva de trabajadores desocupados en la Matanza

El pasado miércoles 19 de junio tuvo lugar una importante movilización de trabajadores desocupados de más de 20 barrios del partido de La Matanza. Alrededor de un millar de personas se reunieron en la intersección de la Ruta 3 y el Camino de Cintura, frente a lo que fue la Textil Oeste, para marchar luego hacia el palacio municipal.


La movilización unió a los barrios María Elena, 22 de Enero, Latinoamérica, Almafuerte, El Vivero, El Porvenir, San Alberto, Los Pinos, CONET, Villa Unión, Villa Scasso, San Carlos, San José, 24 de Febrero, Cooperativo, La Juanita, Virrey del Pino, Central y otros. Exigía nuevamente al intendente y al Concejo Deliberante un subsidio de 500 pesos, la exención impositiva; servicios de luz, agua y gas gratuitos y de la salud para el desocupado y su familia, y puestos de trabajo.


La respuesta de las autoridades, luego de mucho esperar, fue de absoluto silencio y de presencia policial. La indignación fue creciendo junto con la movilización y, finalmente, se reprimió a los manifestantes. La represión a los desocupados es la expresión más contundente de la situación sin salida en que se encuentra este régimen y sus gobernantes.


CGT y CTA


Tanto en una como en otra ‘central’ hay una ausencia absoluta de voluntad de lucha. La CGT colabora abiertamente con los planes de despidos y apoya abiertamente el convenio Fiat-Smata. La conducción, encabezada por Raúl Mathiú (Smata) y Oscar Nieva (Faecys) acaba de realizar un seminario sobre “Estrategia sindical, políticas de empresa y Pymes” (¿¡!?), que ofreció como salida iniciar una “nueva etapa que hace hincapié en la capacitación”. Mathiú es el principal responsable de la implementación de la flexibilidad en el distrito, y en su desesperada carrera a la intendencia satisface uno a uno los requerimientos patronales.


El CTA, por su parte, manifestó que “comparte los reclamos de los barrios”, pero ha realizado esfuerzos enormes para impedir las consignas de subsidio y exención impositiva, e introducir, en cambio, consignas como “por 100.000 puestos de trabajo” (algo que ya figura entre los planes de superexplotación de vecinos en las obras de asfalto), así como los ya remanidos reclamos de créditos ‘blandos’ para las patronales Pymes.


Perspectivas


En el movimiento de desocupados conviven distintas fuerzas políticas (hasta ahora ninguna dominante), que pugnan por la definición de esta terrible situación. El programa inicial de este movimiento manifestaba la influencia de los sectores del centroizquierda (Frepaso, CTA, Ptp).


Paralelamente, existe una crisis política manifiesta, pues el Concejo Deliberante ha sesionado sólo dos veces en lo que va del año (una para votar la privatización de los servicios públicos), y las dos veces debió hacerlo en el marco de la movilización de trabajadores municipales y de los desocupados. En este marco, ¡¡¡la tercera sesión del Concejo tiene fecha… para julio!!!


El futuro de las reivindicaciones de los desocupados está sujeto a una lucha. Los reclamos de subsidio y exención impositiva deben ir unidos a la exigencia del cese de los despidos y suspensiones y el reparto de las horas de trabajo, con la creación de un cuarto turno de trabajo. En ese sentido, sigue vigente el rechazo del convenio Fiat-Smata y la exigencia de salarios mínimos de 1.200 pesos para los trabajadores en actividad.