Sindicales

16/9/2010|1146

Neuquén: Ocupación obrera en Polar-Coca Cola

Los obreros ocuparon la planta neuquina de Polar SA, que, a su vez, es subsidiaria de The Coca Cola Company de Estados Unidos.

La empresa produjo esta semana un lock-out patronal y despidió a 143 trabajadores. La patronal aduce que Coca Cola internacional le exige un plan de inversiones para modernizar su planta que no puede afrontar. Pero todo indica que es un ajuste que nace en la crisis y el parate productivo del propio Estados Unidos.

La empresa decidió trasladar a la provincia de Buenos Aires la producción que hacía en Neuquén, para lo cual recibió, en mayo pasado, un crédito de 50.000.000 pesos del Banco Galicia y del Standard Bank.

Ante los despidos, los trabajadores tomaron una iniciativa de la ocupación, lo cual obligó a las direcciones de la CGT local y del propio sindicato de Aguas Gaseosas (Sutiaga) a convocar a un paro general para el lunes pasado, votado en un plenario de secretarios generales de la CGT.

Pero no habían terminado de bajar los brazos de la votación, cuando el paro comenzó a ser levantado. No hubo tal paro. Ahora se amenaza con otro, pero de la Federación de Aguas Gaseosas a nivel nacional, con la expectativa de que la empresa acepte la conciliación en una nueva reunión que habrá el miércoles. Se estiran los tiempos buscando desgastar la toma de las instalaciones que los obreros mantienen desde hace una semana.

Pretenden torcer la voluntad de los trabajadores para que cambien empleo por indemnizaciones. La primera exigencia de la patronal y de la conciliación que dictó el Ministerio de Trabajo es el abandono de las instalaciones tomadas, es ahí donde les duele. Por lo tanto, mantener la ocupación es clave. La CGT neuquina deja pasar estos despidos masivos en Coca Cola, como antes dejó pasar los de otros sindicatos.

La CTA sigue “mutis por el foro”. Algo que también ya es costumbre.

La “unidad sindical” que pregonan Yasky y Moyano -como se revela en Paraná Metal, en el despido de 500 obreros rurales del Alto Valle, como se vio en la lucha de Stefani- “no vale” para impulsar las luchas sino para garantizar la “paz social” y el boicot a las medidas de fuerza, jamás para dar una respuesta de conjunto a los ataques patronales.

Exigimos: reincorporación de todos los despedidos, por el paro general de aguas gaseosas y un paro general conjunto de la CGT y la CTA.