Los estudiantes de la Universidad por sus reclamos de democratización y el desconocimiento de la elección de rector; los trabajadores de Acción Social por sus reclamos salariales y laborales; la campaña por la expropiación de Zanón; la lucha de los auxiliares de servicio y de los secundarios, han hecho que el levantamiento de la huelga docente no haya significado el cierre de los conflictos de esta provincia.

 

En este marco, en la sede de la Universidad tomada, organizaciones de izquierda, trabajadores de Zanón, docentes, la Federación universitaria, secundarios, organismos de derechos humanos, etc., nos reunimos para impulsar la unidad de todos los sectores que enfrentamos la política del gobierno, e impulsar acciones comunes apuntando a quebrar la política divisionista de la CTA. Esta, enrolada con “armas y bagajes” en la campaña electoral de la UNE (Unión de los Neuquinos, reagrupamiento patronal kirchnerista), pretende utilizar cada conflicto de los trabajadores en función de sus objetivos electorales.

 

La presencia en estas reuniones de los compañeros de Acción Social es la expresión de la ruptura de un sector importante de los trabajadores con el enchalecamiento que intenta mantener la burocracia de ATE. La acción que sostienen desde hace un tiempo prolongado los compañeros de Acción Social golpea uno de los ámbitos más caros del gobierno a la hora de poner en marcha su maquinaria electoral; junto a las reivindicaciones de los estudiantes, de Zanón, de los desocupados, etc., debemos impulsar un plan de lucha en común.

 

Alberto Vidal

 

 

 

El siguiente es un informe para Prensa Obrera realizado por uno de los principales activistas del conflicto.

 

Los/as trabajadores/as del Ministerio de Acción Social hace ya más de dos meses venimos sosteniendo un conflicto con la patronal (gestión Sobisch-Oscos) por:

 

. Pase a planta de los trabajadores que se encuentran bajo una forma precaria de contratación (una modalidad denominada “bajo programa” y locación de servicio), es decir, trabajadores en negro.

 

. Recategorización de los trabajadores en planta ya que la última se realizó hace ya 14 años.

 

. Recomposición salarial, dado que los sueldos promedio de bolsillo oscilan entre 500 y 600 pesos, cuando datos oficiales anuncian el valor de la canasta familiar en 2.000 pesos.

 

El Ministerio de Acción Social funciona de forma descentralizada, pero ello no ha impedido que nos unamos en este pliego de reivindicaciones junto al gremio, porque consideramos imprescindible la organización de los trabajadores/as para enfrentar al gobierno sobischista. Todos los sectores que componemos el Ministerio (UAF, Unidades de Acción Familiar; Hogares, centros de tratamiento, centros infantiles, Consejo de la mujer, nivel central y I) hemos fortalecido la unidad a partir de la Asamblea permanente con debates y medidas de fuerza colectivas, con el firme convencimiento de que es el único medio que garantizará el triunfo de los/as trabajadores/as.

 

Esto, sin lugar a dudas, ha provocado crisis no sólo en el gobierno sino también en la burocracia sindical (ATE, CTA) que por todos los medios han tratado de “boicotear” el conflicto. El gobierno proponiendo arreglos sectoriales y con descuentos de 350 pesos en compañeros que cobran sólo 500 pesos, y la burocracia condicionando a los trabajadores a través del “rosqueo” fuera del espacio de Asamblea y rompiendo las medidas que tratan de profundizar el conflicto.

 

Pero estas maniobras sólo han conseguido que los/las trabajadores/as reafirmemos nuestra lucha llamando a la unidad de todos los trabajadores ocupados y desocupados, estudiantes, y demás sectores en lucha, porque nos convencemos día a día, que el enemigo es uno solo: el gobierno tanto sobischista como kirchnerista.

 

Con la lucha hemos conseguido el decreto de Sobisch llamando a paritarias, que lo entendemos como producto de nuestro reclamo en la calle, porque nuestra lucha apunta a conseguir el pase a planta, la recategorización y la recomposición salarial a priori de paritarias.

 

En la asamblea del 15 de junio hemos decidido por absoluta mayoría continuar con las medidas de fuerza (paro, movilizaciones, cortes de ruta y calles) y no abandonamos la idea de cortar el puente carretero para que este gobierno nos dé una respuesta favorable al reclamo que venimos realizando.

 

A pesar de la negativa al diálogo de la ministra Oscos y de la constante “aparateada” de la burocracia, seguimos luchando poniendo el cuerpo en la calle con unidad, solidaridad y el pleno convencimiento de lo justo del reclamo.

 

Unidad de los que luchan.