Sindicales

10/5/2018

Neuquén: una gran marcha refrenda la continuidad de la lucha docente

Vocal de ATEN Provincial

Más de 12.000 trabajadores de la educación coparon nuevamente el centro de la capital y cerraron con un acto frente a la Casa de Gobierno, demostrando la vitalidad de la huelga.


En los días previos, los militantes de la conducción provincial incentivaban el regreso a las aulas. Como dirección, no garantizaron muchas de las medidas que habían sido votadas, en el afán de no llegar a una movilización masiva el día de hoy, que le permitiera "ser realistas" y terminar con la huelga. La semana pasada, impulsaron en las asambleas el llamado a "cambiar de estrategia" y levantar la huelga, siendo derrotados de manera abrumadora.


En el acto, el orador por CTERA tuvo que escuchar durante todo su discurso el reclamo de miles por un plan de lucha. Todo lo que pudo ofrecer, además de chicanas contra los reclamantes, fue un paro de CTERA para recién dentro de 10 días.


En la cuarta semana de huelga ininterrumpida, el paro continúa firme y la movilización de hoy volvió a ser multitudinaria.



Delegaciones de sindicatos y seccionales recuperadas (Ademys en la persona de su secretaria adjunta Amanda Martín, de Amsafé Rosario, de Suteba La Matanza, Adosac, etc.) estuvieron presentes en la marcha, dándole un tono nacional a la misma. 


En su adhesión, Amanda Martín mencionó que participó el día de ayer en una gran movilización de los estudiantes de los institutos terciarios porteños contra la Unicaba. Y la compañera de Suteba anunció un paro de las seccionales opositoras. Un gran contrastre con la posición de CTERA.


A su turno el secretario general de ATEN tuvo que anunciar, a su manera, que las asambleas de mañana no pueden debatir otra cosa que la continuidad de la huelga.


Una continuidad que ha sido impuesta masivamente por la base y sostenida por la oposición, superando el intento conciliador y liquidador del TEP, la agrupación oficialista. Cuando ésta habla de "ver el contexto", menciona los acuerdos a la baja en otros sindicatos y pinta un gobierno nacional “que cuenta con el apoyo de sectores amplios de la población”. Es un trabajo de zapa sobre el ánimo de los compañeros y compañeras. Oculta el otro "contexto", el que demuestra que la tendencia a la rebelión y la caída de imagen de Macri, colocan a la orden del día el ponerlo todo al servicio de las victorias obreras ahora, y no de la "acumulación" electoral hacia el 2019.

Las nuevas asambleas tienen el desafío de superar esta política de derrotismo kirchneriano, y reiterar la huelga y ponerle fecha al Encuentro de Trabajadores que cada día tiene más adhesión, y que las burocracias no quieren concretar.