Sindicales

24/5/2007|992

No a los despidos en Parmalat

Los trabajadores instalan una carpa frente a la empresa

Los trabajadores de Parmalat instalaron una carpa en la sede de la empresa y sede del grupo Taselli, en la estación Constitución.


Los compañeros reclaman la inmediata reincorporación de los despedidos de la planta de Parmalat de Pilar y el fin de las suspensiones a la totalidad de los trabajadores de esa planta (200 compañeros).


Taselli, el patrón de Parmalat, está despidiendo obreros de la planta de Pilar, con la intención de dar la estocada final de sus planes de vaciamiento. En una empresa que supo contar con 2.000 trabajadores, Taselli la quiere llevar a su mínima expresión, dejando apenas 80, de los 200 que son actualmente.


Los trabajadores no aceptaron los despidos y se dispusieron a defender sus puestos de trabajo. Ya sacaron dos volantes para repartir en el gremio y en las empresas de Taselli, al igual que un afiche, y están realizando varias actividades de difusión.


Taselli pretende acabar con el activismo vinculado a la Agrupación Naranja de Atilra, que se pronunció permanentemente contra los atropellos del gremio y particularmente contra el vaciamiento de Parmalat.


El vaciador es ahora investigado en una de las ramificaciones del “caso Skanska”. Fueron allanadas las oficinas de una empresa de su pertenencia (YCRT), vinculada a la utilización de facturas truchas y sobreprecios en contratos con el Estado. Taselli, otra vez, aparece vinculado a negocios oscuros y turbios, amparados en su amistad con el gobierno nacional.


Es amigo desde la primera hora de Kirchner, que cuando era gobernador le dio la concesión de Yacimientos Carboníferos de Río Turbio, de cuyo vaciamiento Taselli es el responsable, al igual que de la muerte allí de 14 obreros. Taselli es el concesionario del Ferrocarril Roca, a través de Metropolitano, pesadilla que sufren cotidianamente cientos de miles de trabajadores y usurarios, como producto de la falta de mantenimiento, que decenas de veces denunciaron los usuarios y empleados de la empresa.


También se quedó con Altos Hornos Zapla, cuyos trabajadores denunciaron que Taselli estaba vaciando la empresa; además, desde su llegada, hubo dos obreros muertos y un promedio de quince accidentes laborales por mes.


En los momentos de mayor expansión de la industria láctea, Taselli echa trabajadores, sin excusa alguna, con el interés de hacer lo que ha realizado con otras empresas: un negociado donde el pato de la boda son los trabajadores y los usuarios. ¿Es posible que se cierre una planta láctea cuando lo que se produce es algo de primera necesidad para la población?


Ningún despido en Parmalat. Pongamos fin a la precariedad laboral de este vaciador corrupto. Por la puesta en marcha de Parmalat bajo control de los trabajadores.Apoyemos la lucha de los trabajadores contra el vaciamiento y los despidos.