Sindicales

18/3/2010|1120

Nuevo paro en la UTA cordobesa

Se hace necesario el control obrero en Tamse

La empresa de transporte Tamse (propiedad de la municipalidad de Córdoba) viene sufriendo hace bastante tiempo las consecuencias de la política de vaciamiento del intendente Giacomino.
La conducción de UTA, que viene  dejando pasar el vaciamiento, convocó el día 8 de marzo, por la fuerte presion de las bases, a un plan de lucha que consistía en asambleas de dos horas en las distintas puntas de líneas.

En la segunda asamblea por línea que se realizó, los trabajadores votaron trasladarse a la central para poder realizar una asamblea general. Así se hizo y Tamse entró al paro de hecho.

A partir de esto, la conducción pretendió trasladar el eje de la cuestión al Ministerio de Trabajo, un grupo de compañeros marchó hasta allí mientras la mayoría permaneció en la empresa. A las 22 horas, intervino Giacomino y el sindicato se apresuró a firmar un acta donde, en primer lugar, se levantaba la medida de fuerza y se establecía un plan de trabajo de saneamiento de las unidades a corto, mediano y largo plazo.

Este acta fue rechazada por los trabajadores, quienes ratificaron el pedido de la presencia en la empresa del intendente para que se comprometiera personalmente ante los trabajadores. Al día siguiente, se realizó una asamblea a las 10 horas, el intendente en persona dio su compromiso de reparación de la flota, compra de nuevas unidades y estabilidad laboral.

Mediante la asamblea general y el paro, han obligado al intendente a asumir un compromiso que está en abierta contradicción con su política de gobierno y, por lo tanto, se prevé que no cumplirá.

El control obrero de la administración de Tamse se hace totalmente necesario para garantizar un transporte público de calidad y el respeto de las condiciones de trabajo y de la dignidad de los trabajadores. La asamblea general  es el camino en ese sentido.