El conflicto que venimos sosteniendo se prolonga varios meses y seguimos con las manos vacías. Todas las negociaciones parlamentarias y extraparlamentarias han fracasado. El gobierno nacional, por boca de Rodríguez, Corach y Roque Fernández, ha sido claro: no habrá un peso más para los salarios docentes.

Aun el proyecto de ‘financiamiento’ de la Decibe (tramposo por cierto) naufragó antes de nacer.

“Que se vayan a laburar”, fue la respuesta que dio Corach al referirse a los ayunantes.

Para colmo, Carlos Rodríguez, viceministro de Economía, acaba de anunciar la eliminación de la exención del IVA a los libros y publicaciones escolares. Como si no fueran suficientes las señales ya alarmantes de fracaso y rendimiento escolar, dificultades de aprendizaje y bajísimos niveles de lectura de los chicos en edad escolar, ¡¡¡se les suma, ahora, un encarecimiento de los libros!!!

¿Es una exageración cuando decimos que la ‘reforma educativa’ apunta a la descalificación y embrutecimiento de nuestros jóvenes?

Bajo estas condiciones, la necesidad de una respuesta firme y contundente es im-pos-ter-ga-ble. El ayuno en todas las escuelas, decretado por la Ctera para los días 9 y 10 de septiembre próximos, debe ser la oportunidad para la organización de dos grandes jornadas de movilización. Hay que hacerles sentir a Menem, Duhalde y a todos los gobernadores, todo el peso de la docencia unificada por una misma causa.

Llamamos a organizar el ayuno, llamar a asambleas y coordinarse zonalmente para prepararlo. Llamamos a exigir a la Ctera y a los sindicatos que decreten un paro de 48 horas esos días, con carácter activo. Acompañar la paralización de las clases con la permanencia en los lugares de trabajo hasta el día 11 (Día del Maestro) inclusive, invitando a padres y estudiantes, y arrancar de allí para organizar concentraciones y marchas en cada localidad.

• Abajo la reforma anti-educativa

• Salario básico de 700 pesos

• Triplicación del presupuesto educacional

• Respeto del estatuto del docente

Movilizarse y profundizar la lucha hasta derrotarlos.