Sindicales

16/9/2020

Otra vez, 300.000 afiliados al IOMA de La Plata sin obra social

Kicillof financia a las corporaciones que cortan la cobertura médica.

A partir de este 16 de septiembre la Agremiación Médica Platense (AMP), corporación dirigida por los grandes propietarios de clínicas y sanatorios privados, dispuso el corte unilateral del servicio a los afiliados al IOMA (obra social de los estatales bonaerenses) que pasarían a ser considerados “particulares” con el consiguiente pago de la consulta y atención. Estamos ante un segundo “lock out” como el que llevó en el mes de julio a la firma de un “acta” entre la AMP y la presidencia del IOMA para suscribir un “nuevo convenio”: una exigencia de la corporación médica tras haber dejado durante varios días sin servicio a los 300.000 afiliados de la región.

El corte unilateral de la atención vino después de que IOMA y la Defensoría del Pueblo, en representación del “Estado”, anticiparan un acuerdo inminente que finalmente no se produjo y está en crisis. El propio presidente de la obra social, Homero Giles, reconoció que en los 60 días transcurridos desde la firma del “acta acuerdo” a la fecha el IOMA “ofreció a la AMP varias propuestas dando respuesta a las exigencias que estaba solicitando”.

Concretamente, el “nuevo convenio” propuesto por Homero Giles incorpora el aumento del 16% para las consultas, un incremento diferenciado de las prácticas de entre el 8 y el 32%, un aumento del 100% para los honorarios de profesionales de las unidades de terapia intensiva (UTI) y el pago por exposición al Covid-19 retroactivo a abril, mayo y junio. Pero por sobre todo le sigue reconociendo a la AMP el papel de interlocutor privilegiado “archivando” las denuncias por corrupción que pesan sobre sus directivos.

Esta segunda etapa del conflicto, en pocos meses, repite las apretadas de la AMP, que le tomó el tiempo a Homero Giles y al gobierno de Kicillof. Fue el propio gobierno provincial el que en su momento anunció un financiamiento de 400 millones de pesos mensuales a los capitalistas privados de la salud con los fondos del IOMA, descapitalizando y vaciando a la obra social.

Los propietarios de las clínicas y sanatorios, que tienen un peso determinante en la dirección de la Agremiación Médica Platense apelan a la “acción directa” y meten presión por partida doble; para asegurar los subsidios del Estado y para que se encarezcan las prestaciones.

En una carta fechada el 15 de septiembre, IOMA informa que “cumplió con todo lo reclamado por la AMP”. Esa fue la función que cumplió Guido Lorenzino, en su calidad de “defensor del pueblo” y a título del gobierno de Axel Kicillof, después de que la presidencia del IOMA diera marcha atrás con las amenazas de rescindir el contrato con la AMP y mandase al freezer las denuncias por estafa, sobreprecios y defraudación millonaria contra la obra social.

La “Mesa de Enlace” pateó el tablero

En el comunicado de la Mesa de Enlace que agrupa a la Agremiación Médica, a las “sociedades científicas”, las asociaciones de profesionales y al Colegio Médico del Distrito 1, se anuncia el fin de la “tregua” con el IOMA porque el nuevo convenio propuesto no implicaría una “propuesta superadora”.

En su respuesta a esta apretada, Homero Giles advierte con retomar acciones legales pero se cuida mucho de intimar a la Agremiación con rescindir el contrato como represalia por el “lock out”. Para tener una dimensión de lo que representa la Agremiación Médica Platense, el 8% de los profesionales de la AMP se quedan con el 47% de la facturación en detrimento de la inmensa mayoría de los médicos y de los 130 millones de pesos por mes facturados a IOMA. La “administración” de la Agremiación Médica se lleva 11 millones de pesos mensuales en concepto de agente de retención de pago. Es vox populi que médico que no adhiere a la AMP no encuentra trabajo en las clínicas y sanatorios privados, cuyos propietarios controlan la Agremiación.

Sin denuncias penales a la vista y con la satisfacción del 90% de las exigencias de la corporación médica, que preside Jorge Varallo, el choque con el IOMA se concentra en dos puntos: por un lado el aumento de los copagos que deberían afrontar los afiliados  y por el otro la presión de la AMP para que el convenio incorpore una clausula donde se habilite exclusivamente a los profesionales adheridos para “prescribir medicamentos, prácticas u órdenes de internación a ser cubiertos por el IOMA”. Los campeones de la “libre elección” dejan sin cobertura los afiliados para asegurarse una tajada millonaria en la intermediación con la obra social.

Al cierre de esta nota 300.000 afiliados al IOMA de La Plata y la región están sin cobertura médica y en plena pandemia del coronavirus. La AMP no actúa como una entidad gremial sino al servicio de los grandes propietarios de la salud privada que son parte de un desfalco consentido por las sucesivas administraciones. El IOMA es el gran agujero negro al que apelaron y apelan los gobiernos patronales para financiarse.

Rechazamos este “lock out” de la Agremiación Médica Platense y todo aumento de los copagos sobre salarios de miseria y cuando además están suspendidas las paritarias. La experiencia reciente ha mostrado hasta qué punto Kicillof y Homero Giles retrocedieron frente a la “Mesa de Enlace”. Una nueva capitulación no hará sino fortalecer el chantaje contra los afiliados, para que los trabajadores paguemos la crisis y el fracaso de la política sanitaria.

Los sindicatos docentes, estatales, de la salud, judiciales y del Estado bonaerense deben intervenir para imponer la inmediata restitución de la cobertura médica y para defender al IOMA contra todo vaciamiento a favor del capital privado. Basta de financiar a los capitalistas y mercaderes de la salud privada con los fondos del IOMA.

Por una obra social dirigida por los trabajadores y bajo su control.