Pami, la lucha rinde

Un camino para los estatales

La lucha salarial en el Pami concluyó con un triunfo de los trabajadores. Una nueva acta paritaria otorga una compensación para las franjas de empleados con mayor antigüedad, que habían quedado relegados en un acuerdo anterior. El aumento promedio logrado ronda el 25%.

Cerca de un mes de paros, batucadas y asambleas obligaron a las autoridades a revisar el acuerdo firmado con UPCN y UTI, que no superaba el 18%.

Conocido el acuerdo, se abrió una lucha entre los aparatos gremiales acerca de quién había sido el artífice del logro.

Pero ninguno se jugó por garantizar el paro con recorridas y asambleas. También se opusieron a sacar el conflicto a la calle.

Los trabajadores han sacado la conclusión de que los gremios que participaron se subieron a un movimiento que surgió desde abajo. A partir de las acciones autoconvocadas que, desde hace meses, se sucedieron en distritos del interior como Mar del Plata, en Gran Buenos Aires y en los edificios centrales de Capital.

Los delegados de los gremios que directamente boicotearon la lucha fueron expulsados de los sectores adonde concurrieron para atribuirse el triunfo.

Se ha abierto una oportunidad para la organización del activismo independiente.