Papeleros: Alari con Barrionuevo y Duhalde

La Federación del gremio de papeleros, sin consultar a la base del gremio, ha decidido en forma unilateral pasarse de la CGT de Moyano a la CGT “Azul y Blanca”.

A la hora de defender la decisión de irse con uno de los burócratas sindicales más repudiados, Alari cree necesario aclararle al gremio que es “para defender la independencia de los sindicatos respecto del gobierno nacional”, aunque aclara que esto no significa ni “clasismo” “ni aislamiento”, como si a alguno se le hubiera podido ocurrir esta posibilidad.

La decisión de Alari de ir a la Azul y Blanca no tiene nada que ver con la independencia de los sindicatos. Se trata simplemente de marchar con Duhalde. La “Azul y Blanca” es una operación política de un sector de la burocracia sindical frente a la crisis del kirchnnerismo.

La Federación, en estos años, ha provocado un verdadero derrumbe en cuanto a las reivindicaciones de los trabajadores. Con uno de los salarios de convenio más bajos de la industria, y una inmensa penetración de las multinacionales del papel, los industriales ya han realizado tres reconversiones tecnológicas que terminaron achatando totalmente las categorías del gremio.

Las patronales dominan totalmente los lugares de trabajo, donde ni siquiera se pueden realizar asambleas. Hay inmensos niveles de contaminación en la inmensa mayoría de las fábricas, que no pueden combatirse con notitas en El Papelero.

Existe un sistema generalizado de turnos americanos que han quebrado definitivamente el descanso dominical. Hay que apelar a los libros de historia para rastrear una asamblea general o un paro del gremio por sus reivindicaciones. La totalidad de la directiva de la Federación es una foto del pasado.

En vez de teorizar sobre la independencia del sindicato, Alari debería denunciar el ruinoso acuerdo salarial que firmó la Federación, reclamar un 30% de aumento de emergencia, convocar asambleas en todas las fábricas y una asamblea general del gremio para luchar por recomponer el salario y las condiciones de trabajo. Lo demás es para las tribunas.