La Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (Faecys), que agrupa a los sindicatos del rubro, anunció haber firmado la paritaria, dibujándolo con estadística fantasiosa. El anuncio consiste básicamente en el blanqueo de dos sumas por 6 mil pesos al básico (que implica un aumento de solo 500 pesos dado el 8,33% presentismo) y una suma fija no remunerativa de $5000 durante los próximos 7 meses. Es así que para el trabajador inicial (sin el 1% por año de antigüedad) estamos ante apenas un 12% de aumento del salario bruto frente a un 45% de inflación esperada.

Para el caso de los supermercados, si las patronales no pagaran el bono que en forma desigual se cobró varios de estos meses según la cadena, el aumento sería menor al 3%. Armando Cavalieri hizo lo que prometió, se levantó de la paritaria sin plantear nada parecido a una lucha, sino haciéndose eco del reclamo patronal. El 12% queda bastante lejos del 40% que le dieron a la Policía Bonaerense. Se ve que somos esenciales pero no tanto.

La cifra blanqueada prácticamente equivale al monto en negro que se anuncia como suma fija afectando las futuras jubilaciones y la caja jubilatoria.  Recordemos que el pacto de Faecys con la Came (Confederación Argentina de la Mediana Empresa) que recortó el ingreso de bolsillo del trabajador suspendido en un 25% implicó el recorte del 95% del aporte patronal al Anses y agreguemos medio salario pagado por este organismo previsional bajo el programa ATP para los comercios cerrados.

Cavalieri se apuró a cerrar la paritaria, luego de haber pasado casi medio año con la paritaria vencida, luego de las jornadas y pronunciamientos que se sucedieron en la base del gremio a través de las agrupaciones opositoras.

El acuerdo que fue anunciado por la Faecys dirigida por el ‘gitano’ Cavalieri, fue desmentido por un comunicado de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios con fecha 19/9 y luego secundado por la Came y Udeca (Unión de Entidades Comerciales Argentinas). Lo que demuestra que la cosa puede venir peor, incorporando más reclamos patronales como por ejemplo la reducción de un 50% de los días de estudios, el ‘banco de horas’ contra la jornada de 8 horas, la ‘flexibilización’ de las vacaciones, etc. Cavalieri solo anunció cifras, no hizo alusión a si había avanzado con la reforma laboral que él mismo viene fogoneando.

La Came fue la cámara que rechazó rubricar el acuerdo, como parte de un reclamo mayor en el cuadro de crisis política que se agrava. La Came también salió a rechazar el impuesto a las grandes fortunas a pesar de que el universo que lo pagaría estaría afuera de su representación. Esta cámara patronal está reclamando mayores concesiones, reforma impositiva y subsidios. La frazada corta. Cavalieri denuncia que la actitud de la Came se debe a sus elecciones internas.

Al bloquear el acuerdo la Came, las otras dos cámaras patronales del sector se reagruparon con esta y naufragó el acuerdo. Cavalieri anunció el estado de alerta y movilización, y un (misterioso) plan de lucha contra la Came y automáticamente el Ministerio de Trabajo decretó el 22/9 la conciliación obligatoria por 15 días, la única cláusula gatillo es la que activa el ministerio de trabajo contra los reclamos de los trabajadores. Cavalieri salió a denunciar al ‘bloque patronal’ contra la paritaria, le faltó agregar que él mismo es la pieza fundamental de ese bloque que lo desairó.

A pelear contra esta entrega

Que no nos ‘dibujen’ el salario. Cavalieri preanuncia como un logro una estocada al salario, pero la patronal va por más. Ahora nos toca a los trabajadores defender lo nuestro.

Rechacemos la entregada de nuestros salarios, en un momento que se recalienta la inflación, de la mano de la disparada del dólar, los tarifazos y la emisión monetaria del gobierno. Llamamos a todas las agrupaciones y al activismo opositor a rechazar el pacto patronal-Cavalieri contra los salarios y pelear por un 40% para todo comercio y un plus por esencialidad de 20 mil pesos mensuales para aquellos que ponemos el cuerpo para garantizar el abastecimiento esencial de la población. Aprovechemos la crisis abierta por la ‘intransigencia’ de la Came para levantar la ‘intransigencia’ de los trabajadores en defensa de nuestras condiciones de vida. Si somos esenciales que se exprese en el salario. Por un plenario de delegados para votar un plan de lucha.

En el día del empleado de comercio, este lunes 28 se reúne la pujante agrupación Naranja de Comercio para intervenir en la crisis en curso.

Arriba los salarios, abajo la reforma laboral.