Los trabajadores de tráfico de la línea A se encuentran realizando un paro de toda la línea en rechazo a un cambio de diagramas inconsulto por parte de la patronal. En concreto, al empezar la jornada, los trabajadores se encontraron con que Metrovías había convocado a tareas a 38 personas, generando un amontonamiento en los vestuarios. Esta determinación, que viola cualquier medida de distanciamiento social, se da en el marco de un proceso de discusión entre los sectores y la empresa por las condiciones de la apertura.

Hace sólo una semana la empresa intentó convocar al 100% del personal disponible de los talleres de Material Rodante, cuestión que fue respondida por los trabajadores con la amenaza del paro y posteriormente refrendada en el plenario general. Al mismo tiempo se dieron discusiones entre varios sectores de tráfico, como las líneas A, B y D, y las gerencias por las condiciones de la vuelta.

La intención de Metrovías, en sintonía con el gobierno, es “normalizar” el servicio a como dé lugar, sin criterio sanitario alguno. Esta reciente determinación en la A, en plena discusión y con varios sectores movilizados y en estado de alerta, hay que entenderla como una provocación más para embarrar la cancha. Es fundamental que los trabajadores rechacen cualquier atropello de este tipo y discutan un plan de lucha unificado para frenar el aperturismo patronal.