Sindicales

19/4/2007|988

Paro y asamblea en Ti Automotive (UOM)

Un trabajador de Ti Automotive


El lunes 9 de abril, la patronal de Ti Automotive dijo que "adhería" al paro de 12 a 13 horas y pidió a los delegados que se limitaran a un minuto de silencio, mencionando el nombre del compañero Fuentealba. El silencio se rompió cuando los 120 obreros juntos estallamos en un emocionante y tremendo aplauso en honor y memoria del compañero caído en la lucha.


Bastó ese aplauso para que, espontáneamente, se armara una asamblea que discutió las paritarias. En la planta habíamos presentado un petitorio interno, donde pedimos un aumento de un 20% aparte de lo que arregle UOM; la empresa respondió que están esperando la resolución de la paritaria.


Como se planteó en la asamblea, nosotros no queremos esperar más. Ya pasó marzo, estamos a mitad de abril y, según lo que se firme, estos meses ya están perdidos, porque no hay retroactivo.


En la asamblea le dijimos a los delegados que si no tenemos una solución esta semana vamos a firmar un petitorio, pero dirigido a los dirigentes de la UOM para que se negocie urgente porque si no vamos a un paro. No estamos pidiendo limosnas y no queremos techo salarial.


¡Basta de negociar a nuestras espaldas!


Que se incorpore a planta a los chicos de agencia.


Queremos un salario digno porque somos nosotros los engranajes que mueven la economía de esta nación y no podemos esperar más. No puede caer otro compañero docente, metalúrgico, de la construcción, ferroviario, gastronómico, de la sanidad y tantos otros gremios. Digamos basta a la represión. Es tiempo de un cambio, ese cambio es la "unidad" de los trabajadores. Eso que no les gusta ni a los patrones ni a los gobiernos ni a los represores.


Ese día pensé en Neuquén, en el compañero fusilado por reclamar un salario digno para su familia. Pensé en lo que hacen los dirigentes sindicales que dicen representar a los trabajadores. Me contesté que son representantes de los patrones y de los gobiernos de turno. Eso es lo que son. Y pensé: es tiempo de un cambio, desde abajo para arriba, y si no lo saben hacer, nosotros los trabajadores sí sabemos.