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A fines de noviembre de 2014, y un día antes de su votación, apareció "filtrado" en las redes sociales un proyecto de ordenanza redactado por el secretario general del municipio de Pergamino (Carlos Elizalde -UCR) que pedía el arancelamiento de dos de las salas municipales de la ciudad: el Teatro ex Cine Unión Ferroviaria y la sala de Bellas Artes. El proyecto se centraba en tres ejes fundamentales: el pago por parte de los artistas para su utilización (400 y 700 pesos para los artistas locales, y el doble del monto para los foráneos); el pago, además, de Sadaic y Argentore, también a cargo de los artistas; y, por último y de remate, el desligue de responsabilidad del municipio ante robos, daños al edificio o accidentes ocurridos durante el espectáculo (obviamente, responsabilizando al artista "a la gran Ibarra-Cromañón").

Desde el Frente de Artistas Pergamino convocamos a los artistas de la ciudad a marchar el día de la votación del proyecto. Con la asistencia de más de 30 compañeros, el municipio se vio obligado a dar marcha atrás y postergar la votación hasta "previo aviso". Pocos días después, el intendente de la ciudad, Omar Pacini, y el subsecretario de Cultura, Raúl Notta (ambos de la UCR) aparecieron en los medios locales aclarando "no estar de acuerdo completamente" con el proyecto y que llamarían al diálogo a los artistas de la ciudad antes de su futura votación.

Inmediatamente, desde el Frente de Artistas convocamos a asamblea abierta al conjunto de los artistas pergaminenses (donde se sumaron también compañeros de ciudades aledañas) y donde, además del repudio al proyecto, surgieron jugosas discusiones sobre el conjunto de problemáticas que enfrentamos. En la asamblea se conformó APA! (Artistas Pergaminenses Autoconvocados). Después de un multitudinario festival que APA! llevó adelante en una de las plazas de la ciudad (al que asistieron alrededor de 500 personas y participaron más de 50 artistas), seguimos discutiendo posiciones para eliminar el proyecto "cajoneado" y darle salida a todas nuestras problemáticas.

Desde el Frente de Artistas denunciamos contundentemente la orientación política privatista de estos partidos patronales, tanto a nivel local como provincial y nacional, y sus negociados turbios con bolicheros, empresarios de la cultura y la Policía. Además, presentamos nuestro programa para el desarrollo de un plan de lucha de conjunto contra la privatización de la cultura: participación de los artistas en las decisiones culturales municipales; por condiciones dignas de trabajo. Basta de precarización laboral; por el acceso a la cultura para toda la familia trabajadora.