El Rector de la Universidad del Comahue le inició una querella criminal  y una demanda de $10.000 resarcitoria de su buen nombre y honor contra la compañera Silvia Mansilla, secretaria adjunta de ADUNC, secretaria de organización de la CONADU y militante del PO.

¿Cuál es la acusación contra Silvia Mansilla?  Muy simple. El 24 de octubre del año pasado, se realizó una charla-debate en la Facultad de Economía y Administración sobre el Censo Universitario, convocada por el Centro de Estudiantes. El tema del censo estaba al rojo vivo, porque tan sólo un mes atrás, el Consejo Superior de la Universidad del Comahue había adherido a dicho censo y lo declaró obligatorio. El 14 de octubre, resolvió sancionar a los alumnos que no cumplimentaran el censo : “no podrán presentarse a exámenes entre la fecha de finalización del Censo y el 31 de marzo de 1995, así como no podrán realizar trámites administrativos en el mismo período” (ordenanza 114/94) .

La planilla censal interrogaba al alumno sobre su nivel de vida, si realizaba tareas remuneradas y sobre el empleo de sus padres.  Era el padrón que buscaba el gobierno menemista para arancelizar la Universidad. Por eso produjo de inmediato una gran reacción estudiantil-docente en todo el país, y en el Comahue llevó a movilizaciones ante el Rectorado (la Federación Universitaria del Comahue llegó a anunciar la quema de las planillas censales).  Ante esta situación, el rector Bohoslavsky le envió a cada docente una nota instándolos a “persuadir” a los estudiantes de los “beneficios del censo”.

Se llegó así a la Charla-debate de Económicas. Ante más de 100 estudiantes, expusieron el Rector Pablo Bohoslavsky, quien agregó  que si el estudiantado no colaboraba con el censo no habría aumento del Presupuesto,  y el secretario de ADUNC, Luis Tiscornia, en rechazo al censo. Luego se abrió la lista de oradores, con numerosas exposiciones de estudiantes y docentes contra el censo, entre ellas la de Silvia Mansilla, quien denunció el censo como preparatorio del arancel y como un acuerdo político más entre el Consejo de Rectores y el gobierno, y llamó a los estudiantes a no censarse, por lo que fue  ovacionada por la concurrencia.  Ante esta derrota política, Bohoslavsky perdió el control, dio por finalizado el debate, sin antesdejar de decir : “Les anuncio una primicia, voy a llevar a la Justicia a la profesora Silvia Mansilla por calumnias”.

La amenaza del Rector provocó de inmediato  pronunciamientos de repudio de ADUNC, FUC, centros de estudiantes, agrupaciones estudiantiles, de docentes y no docentes y del Plenario Nacional de Conadu.

Un mes y medio después, Bohoslavsky dio una vuelta más en su política antiuniversitaria: el 15 de diciembre, el rector y el Consejo Superior votaron la reducción del presupuesto salarial docente para 1995, lo que llevaba a despidos. Cuatro días después, una masiva asamblea docente resolvió un paro de actividades y la expulsión del gremio de todos los funcionaris incluido el rector, los consejeros docentes superiores y directivos de facultades que votaron el ajuste y los despidos.  A mediados de febrero, la Mesa Ejecutiva de la CONADU y dirigentes de ADUNC concurrieron a denunciar los despidos ante el Consejo Interuniversitario Nacional de Rectores (CIN).

Una semana más tarde, Bohoslavsky presentó la querella criminal y demanda civil resarcitoria contra Silvia Mansilla, con el argumento de que fue “injuriado” en la charla-debate del mes de octubre.  Los testigos ofrecidos por Bohoslvasky son funcionarios de la Universidad y algunos miembros del Centro de Estudiantes de la Facultad de Turismo, afines al Rector.

ADUNC comenzó una campaña de repudio con petitorios y solicitadas en los diarios. El Congreso Extraordinario de CONADU, realizado el 17/18 de marzo, resolvió enviar un telegrama a la Universidad del Comahue exigiendo el cese de las persecuciones políticas a los docentes y el levantamiento de la querella, llamando a todas las asociaciones de docentes a hacer lo mismo. La Asociación de Docentes de la Universidad de Misiones se pronunció en el mismo sentido.

La Conferencia Nacional de la Izquierda resolvió hacer de esta lucha  una campaña  nacional e internacional, con petitorios, telegramas y pronunciamientos. Los funcionarios que responden al Estado capitalista pretenden llevar a la justicia penal a los compañeros que son defensores consecuentes de la causa de los trabajadores. Es una persecución política al servicio de los explotadores.

La derrota de los Bohoslavsky será un gran triunfo de la lucha y la democracia obreras contra el gobierno capitalista y los destructores de la educación, de los derechos sindicales y las conquistas obreras.