Sindicales

30/5/2003|756

Por la reapertura bajo control de los trabajadores

Los trabajadores de la Clínica Junín, de Córdoba, resolvieron ocupar el viernes 24 las instalaciones de la empresa en respuesta a los más de veinticinco telegramas de despido enviados por la patronal en represalia a las medidas de lucha tomadas por sus trabajadores… para cobrar los diez meses de atraso en el pago de salarios.


La crisis terminal por la que está atravesando la Clínica Junín es la expresión más palpable del derrumbe de toda la organización capitalista de la salud. En el Hospital Privado se rebajaron los salarios, no se renovaron contratos y pesa sobre él una amenaza de venta al pulpo de la gerenciadora Presal, regenteada por Jaimovich. El Hospital Italiano tiempo atrás despidió a treinta empleados; la Clínica Richieri estuvo tomada por sus trabajadores; en la mayoría de los centros de atención privados reina una situación de inestabilidad.


La tendencia general es hacia un agravamiento de este cuadro a partir de la aprobación de la Ley de Quiebras, que permitirá que las empresas endeudadas sean absorbidas por sus acreedores, lo que provocará racionalizaciones de personal, rebajas salariales, despidos y suspensiones.


Frente a este cuadro, la burocracia sindical de Atsa (Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina) dejó pasar una y mil veces los ataques contra los trabajadores sin impulsar ni una mínima medida de lucha en defensa de los compañeros afectados.