Por la reincorporación de todos los despedidos de Shell

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La semana pasada la refinería Shell ubicada en Dock Sud despidió a 10 trabajadores. Los despidos responden a un doble objetivo: por un lado, tal como ocurre en gran parte de la industria, la patronal busca achicar el plantel y aumentar los ritmos de trabajo.

Por otro lado, un sector de los despedidos formó parte de una lista para la elección de cuerpo de delegados que fue impugnada por la burocracia. Un reciente fallo judicial favorable plantea la posibilidad de una nueva presentación de manera que la patronal busca curarse en salud y sacarse de encima a los que podrían encabezar la resistencia a sus planes de ajuste.

En la zona sur tenemos entre otros el caso de la alimenticia Calsa, en Lanús, con 54 despidos o los 13 de la harinera Lagomarsino, también en Avellaneda.

Al momento de escribir esto, comenzaban a realizarse asambleas por turnos para discutir la cuestión de los despidos; esto se hace a pesar de la actual Comisión Interna, alineada con la burocracia de Roberti (de la Federación de Petroleros y Gas Privado) que no está dispuesta a mover un dedo.

La defensa de los puestos de trabajo empieza por rechazar los despidos actuales y prepararse para tomar medidas de fuerza por la reincorporación de todos los compañeros. La solidaridad activa del movimiento obrero y las organizaciones de la zona sur será clave para quebrar los planes de racionalización de la patronal de Shell.

Corresponsal