Sindicales

10/5/2012|1221

Prensa, una paritaria desde abajo

Después de 37 años sin discusión

Delegados paritarios

Se cerró la paritaria de diarios con un aumento del 23,2% en tres cuotas, de carácter acumulativo, más una suma fija de 1.000 pesos por única vez, lo que lleva el promedio anual a un 24 y un 25,5% para las distintas categorías. También se estableció una grilla salarial (virtualmente, la primera desde el convenio del ‘75), que fija un mínimo para la categoría "testigo" (redactor) de 5.700 pesos a abril (para los más rezagados, el aumento puede llegar al 100%). Además, se fijó un retroactivo de un 8% por mes para los trabajadores cuyas paritarias por empresa vencieron antes de la firma del acuerdo.


Batalla y triunfos


La paritaria quiebra 37 años de bloqueo por parte de la burocracia, que obligaba a pelear convenios por empresa. Se impuso la elección de delegados paritarios por empresa, responsables frente a sus respectivas asambleas. Funcionó el plenario de delegados, por primera vez en más de veinte años, con reuniones semanales.


Presiones y debilidades


Las presiones de la cámara patronal -liderada por Clarín y La Nación, y los medios oficialistas y el Ministerio de Trabajo, para que las paritarias firmaran un salario a la baja- fueron brutales. Se manifestó cuando una mayoría de siete paritarios ligados a corrientes filo-K contra cinco, decidió inconsultamente el levantamiento del plan de lucha. Fue una adaptación al techo salarial de Cristina K.


Paros y movilizaciones


A la prepotencia de la cámara patronal, que se había plantado en una oferta de 21% para todo el año, los trabajadores de Prensa le respondimos con movilizaciones, paros, asambleas y aplauzasos contundentes que, en los hechos, se convertían en nuevos paros y la decisión potente de retirar las firmas. Las medidas alcanzaron a que Clarín -pese a que lleva más de 12 años sin comisión interna- en una asamblea de más de 120 trabajadores, éstos eligieron delegados paritarios. Un enorme logro en la empresa más grande del gremio.


La Naranja y el PO


La batalla de años que dimos desde La Naranja y el PO por las paritarias penetró profundamente en el gremio. Nuestra campaña de que éramos el único sindicato sin paritarias caló hondo. Con este planteo, el frente opositor que integramos había derrotado a la burocracia en las empresas de la Capital en las últimas elecciones del sindicato.


Una nueva etapa


Esta lucha, la primera que se da de conjunto en más de veinte años, provocó un vuelco en la situación del gremio. Cuando Perfil advirtió que el aumento sólo lo iban a recibir los trabajadores del diario y de la puntocom, alcanzados por el acuerdo, y no así las revistas, la comisión interna amenazó con ocupar la editorial y arrancó que el aumento abarcara a todo el personal. La Naranja trabajará por el cumplimiento del acuerdo en todas las empresas, ayudará a poner en pie comisiones internas donde no las haya e impulsará la continuación de la paritaria para negociar los puntos pendientes (regulación del trabajo de los colaboradores, el sector más explotado del gremio) y la recuperación del feriado el Día del Periodista, entre otros.