Sindicales

17/9/2015|1381

Primer triunfo


Se ha cerrado con un triunfo la primera parte de la rebelión antiburocrática en Apta. El Ministerio de Trabajo tuvo que dar por nula la asamblea en la que Cirielli terminó huyendo al verse en minoría, cuando casi 800 compañeros superamos los intentos de la patota de Barrionuevo por dejarnos afuera del local de Gastronómicos donde debíamos elegir Junta Electoral.


 


Finalmente, luego de una serie de reuniones y maniobras de la burocracia, la Junta Electoral quedó conformada. Antes hubo que superar un acuerdo cocinado entre el oficialismo y el ex ciriellismo (ahora yaskista) que entregaba la mitad de la Junta a la burocracia. 


 


Los representantes del Frente de Trabajadores Aeronáuticos (FTA) rechazaron este armado exigiendo un representante por lista, la inmediata entrega de los padrones, el otorgamiento de licencias gremiales a candidatos durante toda la campaña electoral y a los fiscales durante el propio acto eleccionario.


 


El ministerio aceptó todos estos reclamos y la composición final quedó con dos oficialistas y un miembro por cada una de las tres agrupaciones opositoras más un veedor ministerial.


La Junta ha comenzado a funcionar en oficinas del Ministerio y no en el gremio, lo que disminuye la posibilidad de aprietes a los miembros de la oposición.


 


Los técnicos aeronáuticos ven este resultado como un fruto palpable de la movilización. Ha sido un golpe durísimo para la burocracia de Cirielli.


 


En este contexto se vence la paritaria aeronáutica. El FTA está llamando a todos los sectores a votar en asamblea el reclamo salarial. Este no puede ser inferior al 40%, teniendo en cuenta lo que se ha perdido en los últimos acuerdos y la inflación futura. Corresponde también incluir en la negociación un reintegro del 50% del impuesto al salario, ya que el Estado que administra Aerolíneas Austral paga el aumento por una ventanilla y por otra nos lo saca.