Sindicales

24/6/1999|632

¿Quién es el responsable?

El Hospital Larcade, que cubría las necesidades de los 800.000 habitantes del ex municipio de General Sarmiento, fue condenado a la desaparición cuando, a sólo treinta cuadras, se construyó otro hospital, el Mercante. ¿Por qué semejante despilfarro? ¿Por qué no se concentraron los recursos en el mejoramiento del hospital de cabecera del distrito?


La razón es que el Hospital nuevo se estableció, desde el principio, con normas de arancelización, privatización periférica de servicios (limpieza, comedor, lavandería, mantenimiento) y con personal contratado, flexibilizado y sin estabilidad.


A partir de entonces, comenzaron los despidos en el Larcade, el desmantelamiento tecnológico, el despido de dirigentes gremiales de los médicos y la caída de los aportes de la provincia y del municipio. Todo, como denunciaron los propios trabajadores del Hospital, para convertir al Larcade en un mero consultorio externo.


Como el Larcade, los grandes hospitales provinciales y municipales (como el Posadas, el Castex, el San Fernando) están jaqueados por la política provincial de desmantelamiento de la salud pública y de arancelización.


Después de la creación del Mercante, se dividió el partido de General Sarmiento. El Mercante quedó en José C. Paz; en Malvinas Argentinas, el intendente Cariglino está creando un nuevo hospital —también arancelizado y semi-privatizado— que dejará en la lona al viejo Hospital de Los Polvorines.


Sin recursos para construir su propio hospital arancelado, Rico se ha visto obligado a imponer la arancelización del Larcade, lo que significa imponer una flexibilización y una desvalorización de los trabajadores de la salud al mismo nivel de los hospitales arancelados de Duhalde.


Es imprescindible la formación de coordinadoras interhospitalarias e intergremiales y de personal de hospitales para garantizar el éxito del paro provincial y de la marcha a San Miguel, llamando a la movilización a todo el movimiento obrero, estudiantil y popular.