Sindicales

31/8/2006|961

Regalo al degennarismo

Agrupación Naranja

Cuando ya estaba firmada el acta que transcribimos al dorso, el Frente Gremial, representado por el PC, desconoció los acuerdos para una lista común de la izquierda que podía arrebatar la dirección de Conaduh al degennarismo.


La lista sería expresada por un triunvirato asentado en la rotación de la secretaría general en los tres años de mandato y basado en un claro programa delimitado de Kirchner y de Filmus, y su ley de “Financiamiento educativo” que sanciona el hundimiento de la universidad pública y las leyes educativas privatistas y de mercantilización de la educación inspiradas en el Banco Mundial.


Llegamos al acta transcripta al dorso tras un profundo debate de balance de la gran huelga general de 2005 y de toda la lucha de Conaduh por referencia a la otra Conadu y su dirección entregadora que firmó los topes del gobierno junto a Ctera, llamando a las asociaciones de base a sumarse a Conaduh. Empezando por la Marcha Federal del 15 de septiembre contra las leyes antieducativas, al frente de la cual está Conaduh, junto a los Suteba combativos, la Fuba y toda la docencia y el movimiento estudiantil combativas del país.


La Agrupación Naranja fue entusiasta impulsora de la lista común, de este debate programático al que llegamos con propuestas escritas y fue además quien elaboró la propuesta del triunvirato a la postre aceptada por los negociadores de las tres agrupaciones.


La ruptura de esta lista ganadora de Conaduh tiene especial importancia cuando la conducción de la CTA está siendo copada por elementos kirchneristas como Yasky, futuro secretario de la central, precisamente el mayor entregador de las reivindicaciones docentes y educacionales, verdadero ministro sin cartera del gobierno.


El desconocimiento de la rotación evidenció la intención de que María Teresa Basilio, de la Universidad de Luján, miembro del PC, retuviera la secretaría general los tres años.


No puede haber sido ajeno a semejante decisión la posición del Partido Comunista, que integra la dirección oficial de la CTA, a la que revalorizó como “central alternativa”, a pesar de haber archivado toda acción de lucha nacional frente al gobierno Kirchner, particularmente mientras se sucedieron grandes huelgas docentes en distintas provincias y nuestra gran huelga de 205, pero no sólo en la educación, también en Astilleros, en el Garrahan, entre los mineros del Turbio, como hoy está ocurriendo entre la salud y los estatales de Santa Cruz y los docentes cordobeses.


El canje de deuda externa por salarios estatales, por jubilaciones y por educación y salud, no puede haber sido más evidente y extremo durante este gobierno, algo que impactó de lleno en el 1,2 millones de afiliados de la central, que sin embargo se encuentra envuelta en la pugna de cargos de los piquefuncionarios que dominan la CTA.


Con la ruptura de la lista común se ha hecho un trabajo sucio a favor de la conducción actual de Conaduh, que es correa de transmisión de esta política. La maniobra fue finalmente acompañada por la otra agrupación (PCR e independientes) que siguió así una orientación que lleva en Ctera, donde su lista Azul y Blanca es aliada de Yasky, contra la unidad de la izquierda. Una conducta que ya tuvo en la anterior elección de Conaduh, dividiendo para que reine siempre la dirección oficial.


La Lista Naranja, compuesta por docentes de once universidades, encabezada por los secretarios generales de AGD-UBA y de Bahía Blanca, llevará en alto el programa descripto, para terminar con el divisionismo de los aparatos colaboracionistas en la docencia universitaria, poniéndose al frente de la lucha como lo hicimos desde la secretaría gremial de Conaduh estos tres años y como lo estamos haciendo en la organización de la próxima Marcha Federal del 15 de septiembre.


Lucharemos por una Conaduh combativa, organizadora de toda la docencia universitaria, que garantice la independencia de clase frente al gobierno que vacía la universidad pública. Por la media canasta, por el nombramiento de todos los ad honorem, por la universidad pública y la democratización del gobierno universitario.