Sindicales

11/12/2014|1344

Rendición de cuentas del último año de trabajo parlamentario

La lucha contra Monsanto y contra despidos y suspensiones tuvieron un lugar destacado entre los más de 50 proyectos presentados en la Legislatura cordobesa. También contra la impunidad y por los derechos de la mujer, entre otros.

legisladora del Frente de Izquierda


Este año de trabajo parlamentario se presentaron más de 50 proyectos ligados a las principales reivindicaciones y luchas de los trabajadores y los sectores populares, y se colocó a la banca como un sostén de las mismas y como un vocero político de un programa de salida frente a la crisis capitalista.


 


Uno de los principales ejes de trabajo fue la lucha contra los despidos y suspensiones. Presentamos el proyecto contra el cierre del frigorífico Estancias del Sur, que fue votado en la asamblea general de trabajadores. Proyectos de apoyo a conflictos como el de Conmeca y Weatherford fueron aprobados por mayoría en el recinto.


 


Presentamos la ley para prohibir despidos y suspensiones y por el reparto de las horas de trabajo, para dar una salida integral a la crisis laboral. Arrancamos una sesión especial para debatir la situación, en particular la de la industria metalmecánica, donde desenvolvimos una caracterización y un programa; en apoyo a nuestros planteos realizamos un acto con representantes obreros de la industria de Brasil frente a las puertas de la Legislatura.


 


En defensa del salario, en diciembre de 2013, presentamos un proyecto exigiendo un aumento de emergencia para los trabajadores estatales. En el curso de 2014 presentamos la ley de salario mínimo y por la reapertura de las paritarias. Impulsamos otras más específicas como la ley contra la tercerización laboral, ley de residentes de la salud, la de disolución de la Unidad de Títulos en la docencia, entre otros.


 


 


Ambiente


 


La lucha contra Monsanto y en defensa del agua y la tierra suscitó masivas movilizaciones durante 2013/2014 y el surgimiento de asambleas populares en diferentes localidades. Al proyecto que había sido presentado en 2013 por la prohibición de la instalación de Monsanto en Córdoba -que juntó más de 7.000 firmas-, se sumó la ley de emergencia ambiental que nucleó el apoyo de todas las asambleas ambientales de la provincia. Con la denuncia a la ley provincial de ambiente como un artilugio para viabilizar la instalación de Monsanto, trabada por la lucha y por resoluciones judiciales y administrativas arrancadas por ella, la banca se colocó dentro de la Legislatura como la única defensora del ambiente y los recursos de la provincia, enfrentando la política de De la Sota, Juez y la UCR de entrega a los pulpos del agro e inmobiliarios del control de la tierra y la producción agropecuaria.


 


 


La lucha contra la impunidad, por la vivienda y la situación de la mujer


 


Impulsamos la ley por la anulación del Código de Faltas, contra las reformas reaccionarias que pretenden imponer de conjunto los bloques en la Legislatura, inclusive tratando de incorporar cláusulas contra las huelgas. Acompañamos la lucha contra el gatillo fácil, con un proyecto por la destitución del jefe de Policía.


 


Planteamos una ley de asistencia a las víctimas de violencia, una resolución por la destitución de los fiscales por el caso Paola Acosta, y un proyecto por la elección directa del Consejo de la Mujer. Nuestro trabajo se entrelazó con los principales reclamos de las masas: presentamos un proyecto de ley de para resolver el déficit habitacional, y otra por la expropiación de terrenos en Juárez Celman, ocupados por 400 familias.


 


Junto a la comunidad palestina impulsamos un proyecto contra la masacre en la Franja de Gaza.


 


 


Balance


 


La enorme iniciativa política de la banca del Frente de Izquierda motivó la reacción de todo el arco político patronal, que montó un operativo para expulsarnos de la Legislatura y bloquear el ascendiente político que nuestro trabajo recogía entre los sectores populares. El tiro les salió por la culata y la campaña contra la sanción al Frente de Izquierda se plasmó en movilizaciones y miles de pronunciamientos; la adhesión política creciente terminó por desbaratar la Cuestión de Privilegio, y así obtuvimos un enorme triunfo político.


 


Propiciamos un trabajo colectivo de la banca entre las tres fuerzas que componen el Frente, pero este propósito no escapó a las tendencias faccionales que están presentes dentro del mismo y, por lo tanto, se cumplió a medias. El 10 de diciembre, en función de la rotación de la banca, renunciaré para dar lugar a Laura Vilches, del PTS.