Sindicales

5/5/2020

Repartidores: sin baños, sin derechos

El 8, paro y movilización al Ministerio de Trabajo.

Agrupación de Trabajadores de Reparto (ATR)

Como venimos reportando en Prensa Obrera, la pandemia vino a agudizar la precariedad laboral en la cual se encuentran inmersos más del 40% de los trabajadores a nivel nacional. Uno de los sectores más afectados es de los repartidores de aplicaciones, cuya actividad ha sido catalogada como esencial.


Un aspecto más que importante es la imposibilidad de lavarse las manos en baños públicos y privados, cerrados por la cuarentena. La actitud de las patronales de no garantizar al repartidor un lugar digno en el cual poder higienizarse y hacer sus necesidades representa, además, un factor adicional de riesgo en materia de contagios (y un especial oprobio para las mujeres, en días de menstruación). Recae en la buena voluntad de los trabajadores de los comercios darles acceso a los sanitarios.


Es parte de una precarización que llega por todas las vías. Los repartidores y mensajeros intensificaron su jornada laboral al ser la vía de distribución de alimentos, insumos farmacológicos, mensajería administrativa y otro sinfín de objetos,  pero eso no ha significado un alza en los ingresos por hora o en las condiciones laborales. Trabajan extenuantes jornadas de 8 a 12 horas para poder juntar un ingreso que permita comer y abastecer a las familias .


El cumplimiento de los protocolos de higiene y seguridad, al que instan tanto la Organización Mundial de la Salud como el Ministerio de Salud, recae directamente sobre los repartidores. Los insumos más básicos como barbijo, guantes y alcohol en gel son costeados por ellos, con un costo significativo, más ante lo magro de los ingresos que perciben.


La pandemia no solo ha puesto de relieve problemas que ya acontecían, sino que ha demostrado la inactividad y la inoperancia de los sindicatos del sector como Asimm, Sucmra, Acti y APP, cómplices con su silencio de un abismal empeoramiento de las condiciones laborales con su abismal silencio.


En contraste, los repartidores decidimos organizarnos para hacerle frente a la precarización que atenta contra nuestras vidas.


Exigimos a Uber Eats, Rappi, Glovo y Pedidos Ya, como también a las empresas de mensajería, que se le garanticen a todos los trabajadores elementos de seguridad e higiene, aumento de pago por envío del 100% y espacios propios de los trabajadores, que cuenten con baños para higienizarse en el marco de una pandemia. Esto hace aún más urgente la necesidad de la regulación de la actividad, donde se ponga a resguardo la vida y la salud de cada repartidor, y se garantice cobertura médica (de la que hoy día carecen).


El próximo viernes 8 los trabajadores vamos al paro desde las 10 hasta las 16 horas. Un paro que tendrá carácter activo, movilizándonos hacia el Ministerio de Trabajo para denunciar al Estado como cómplice de la precarización laboral en la cual nos vemos inmersos.


Llamamos a las 11 h en el Obelisco para comenzar la movilización al Ministerio de Trabajo a las 12:30 h, culminando con una conferencia de prensa a las 14 h.