Sindicales

27/8/2015|1378

Rodear de solidaridad la lucha de Petinari


La semana pasada desalojaron a los trabajadores de Petinari, la fábrica de acoplados y remolques ubicada en Merlo que, frente a un virtual vaciamiento por parte de la patronal, hace 25 días tomaron la fábrica y recientemente pusieron en funcionamiento las máquinas para cumplir un pedido realizado por un cliente.


 


Con la turbia orden de dos fiscales de Morón, la infantería y patrullas de la Federal, se hizo efectivo el desalojo. Distintas organizaciones políticas nos hicimos presentes inmediatamente en los portones de la fábrica para acompañar a los compañeros.


 


Los trabajadores de Petinari hoy en fábrica son alrededor de 50 (con el apoyo de 30 más que están “changueando” y se acercan a la tarde). Los une la conformación de una cooperativa. Han presentado un proyecto de expropiación en la Legislatura bonaerense, al cual dimos nuestro apoyo. El diputado del Frente de Izquierda, Guillermo Kane, visitará esta semana la fábrica para profundizar los ejes del proyecto.


 


Los Petinari (dueños) negrearon a sus trabajadores durante años. Siempre pagaron salarios por debajo del convenio metalmecánico.


 


Varios trabajadores sufrieron accidentes graves en la fábrica, algunos de los cuales terminaron con muertes.


 


La patronal debía aguinaldos, vacaciones y, este año, salarios de enero y febrero. Los trabajadores no lo soportaron más: fueron a la huelga general por tiempo indefinido.


 


La fábrica nunca reinició su labor, fueron siete meses de corte parcial de la ruta 200, aguantando el frío y la lluvia, pidiendo la colaboración de los automovilistas para llevar algo de dinero a sus casas.


 


El Smata se borró (extraoficialmente a cambio de un terreno cedido por los Petinari). Los obreros hicieron, así, una última experiencia con el sindicato, que clarificó sobre su papel propatronal.


 


Ni el intendente Raúl Othacehé ni el candidato a reemplazarlo, Gustavo Menéndez, ni el gobernador Scioli se hicieron cargo de la situación que viven las 140 familias que quedaron en la calle en febrero pasado.


 


La salida debería pasar por la expropiación sin indemnización a la patronal, la puesta en marcha de la fábrica bajo control de los trabajadores y que el Estado se haga cargo de asegurar la continuidad.


 


¡Hay que rodear de solidaridad a los trabajadores de Petinari en lucha! Todos al acampe en ruta 200. Este jueves 27, asamblea abierta convocada por los trabajadores.