A cargo del cierre del Plenario Nacional de Trabajadores convocado por el sindicalismo combativo en el estadio cubierto de Lanús, Romina Del Plá (secretaria general del Suteba Matanza y diputada nacional del PO-FIT) reivindicó el método que éste se dio, con el debate en comisiones y la votación previa en asambleas de los sindicatos. “Es un ensayo de cómo tendría que ser una CGT dirigida por el clasismo”, apuntó. Es el método, dijo, con el que discuten la AGD-UBA, el Sutna, los Sutebas combativos.



Las resoluciones votadas por el plenario, añadió Del Plá, dan una respuesta al ataque del gobierno. “Estamos promoviendo la intervención masiva de la clase obrera con sus propios métodos: las huelgas, las ocupaciones”, explicó. Postuló un programa que incluye la ocupación de toda empresa que cierre o despida, el rechazo de la reforma laboral, la reapertura de paritarias, y medidas de fondo como la nacionalización de las empresas de servicios para terminar con los tarifazos, la nacionalización del comercio exterior y la banca, y el no pago de la deuda externa.



Llamó a reforzar la independencia política de los trabajadores, “la única forma de tener una salida que no sea que la crisis la paguemos los trabajadores”.

Caracterizó el paro del 25 como “un paro para descomprimir”. Y llamó a darle un carácter activo. “Solo con la huelga general vamos a derrotar definitivamente los planes de ajuste”. 



También se refirió a la lucha por el aborto legal, señalando que fue la movilización de un millón de hombres y mujeres lo que permitió lograr la media sanción del proyecto de ley en la Cámara de Diputados. Por contraste con la burocracia sindical y los movimientos sociales alineados con el Vaticano, reivindicó a los sindicatos presentes en el plenario, que participaron de la lucha por esa conquista.



Y, frente a la política de un sector de la burocracia y del peronismo que pretende no levantar olas y esperar a las elecciones de 2019, enarboló una política opuesta basada en la lucha contra el ajuste, por la recuperación de los sindicatos y por el desarrollo de una alternativa política y de poder.



“En definitiva, luchamos por un gobierno de los trabajadores”, concluyó.