Sindicales

6/7/2021

San Martín: insultante “propuesta” del Concejo para trabajadoras de casas particulares

Ante la precarización laboral, el Frente de Todos propone una campaña de concientización.

Dos de cada diez mujeres de San Martín son trabajadoras de casas particulares, quienes trabajan en las peores condiciones: de manera informal, con salarios por debajo de la línea de indigencia y sin licencias ni obra social. Frente a esta precarización laboral tan extendida en nuestro distrito ¿qué “propone” el municipio a través del Concejo Deliberante? Una campaña de concientización para “difundir” sus derechos y “fortalecer el diálogo entre trabajadoras y empleadores”.

Supuestamente, esta es la conclusión que sacan del informe de la OIT (Organización Internacional del Trabajo), un informe que muestra en cifras que las trabajadoras de casas particulares representan uno de los sectores más pobres de nuestro país, con sueldos por debajo de la línea de pobreza. En estas condiciones, plantear una respuesta con una campaña de difusión es un insulto.

El municipio, que hacia afuera monta una falsa imagen de defensor de los derechos de las mujeres, da esta respuesta miserable al sector de trabajadoras mujeres más golpeadas de San Martín. El 99% de las TCP son mujeres y tienen doble carga, ya que se les suma las tareas de cuidado en el hogar no remuneradas: el 43% son jefas de hogar y el 87% tienen a cargo hijas/os menores de 18 años.

Un elemento clave de esta “propuesta” es el contenido que tendría esta campaña de difusión, a cargo ni más ni menos que del mismo Estado que vulnera sus derechos. Quien fija la escala salarial es el propio Estado, a través de la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares, dependiente del Ministerio de Trabajo. Son ellos los responsables de que los salarios de estas trabajadoras sean miserables, poniendo a gran parte de las mujeres del distrito en una situación de absoluta vulnerabilidad y desprotección, y habilitando los abusos patronales.

La ley de Régimen Especial de Contrato de Trabajo para el Personal de Casas Particulares, sancionada en 2013, no ha sido una garantía de condiciones laborales, que de hecho empeoraron durante la pandemia, con menos contrataciones, peores salarios y sin un acceso irrestricto al IFE para vivir una cuarentena sin hambre.

Es evidente que las trabajadoras no necesitamos de campañas de concientización y menos en manos de quienes nos precarizan. Necesitamos un salario igual a la canasta básica familiar, licencias laborales, pago de aguinaldo, obras sociales e indemnizaciones por despido. Repudiamos esta falsa propuesta del peronismo en San Martín, cuya única función es servir a la puesta de escena de un municipio “feminista”, mientras las mujeres pobres pagamos la crisis. Vamos por un sindicato que defienda efectivamente nuestros derechos laborales y nuestra atención en salud, hoy totalmente abandonados por los gremios existentes.