Sindicales

25/8/1994|426

San Miguel: Importante victoria en la escuela 503

La escuela 503 logró evitar por este año el cierre de dos de sus grados y el despido de seis docentes como consecuencia de aquéllo.


Esta victoria se debe principalmente a que un sector de los maestros supo entender que la clave del triunfo pasaba por poner en estado de movilización a toda la escuela.  Fue así que  se tomó la iniciativa de redactar una gacetilla de prensa que fue tomada por distintos medios gráficos y radiales del distrito; se le envió fax a medios de la capital (algunas radios la leyeron al aire);dos canales de cable de la zona se acercaron al colegio para realizar notas;nos acercamos a las escuelas vecinas a plantear la solidaridad con nuestra lucha; y planteamos la coordinación de una marcha con las demás escuelas especiales del distrito hasta el consejo escolar.  Paralelamente a esto, hicimos dos asambleas masivas junto a los padres de nuestros alumnos que se acercaron en gran número (hay que tener en cuenta que las especiales son escuelas que no están insertas en las comunidades de donde provienen los alumnos sino que éstos son derivados de todo el distrito).  Los padres se solidarizaron con nosotros comprometiendo su presencia en la movilización; muchos se llevaron la gacetilla para acercarla a las radios de su barrio; un grupo se acercó a un canal de San Miguel para hacer la denuncia….


En fin, en pocos días nuestra lucha tomó tal estado público que la inspectora de área tuvo que, primero,  desautorizar la movilización amenazando con sanciones al personal que lo hiciere; y, segundo, cambiar sobre la marcha el día para visitar la escuela al enterarse que habíamos invitado a los padres para participar de la reunión.  La inspectora temía ser interpelada por la comunidad educativa …


Hagamos un balance


Ahora nos resta  sacar las enseñanzas de esta lucha:


En primer lugar, comprender que sólo logramos un triunfo parcial y limitado; parcial, porque de ningún modo hicimos retroceder la medida de aumentar el número de alumnos por grado, sino que sólo logramos tiempo para alcanzar la matrícula requerida; y limitado porque ya para el año próximo nos congelan una vacante de preceptoría.


Pero la enseñanza fundamental es ver que esto sólo se logró porque fuimos capaces de proponer y emprender medidas de acción directa, sorteando, de un lado, las amenazas de las autoridades, y del otro lado, el aislamiento que nos quiso imprimir la burocracia del SUTEBA; es decir que supimos organizarnos confiando en nuestras fuerzas junto a la de los padres de nuestros alumnos.


Ahora hay que encarar la lucha por los ocho y diez alumnos de máximo por grado (moderados y leves respectivamente) y la herramienta para ello es formar la coordinadora de escuelas especiales en el distrito..


Este es el desafío. Manos a la obra.