Sindicales

18/7/2020

Sanidad: Héctor Daer actúa como representante de las patronales

Una lista de traiciones y persecuciones a los trabajadores.

Héctor Daer es uno de los secretarios generales de la CGT y dirigente de la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad de Argentina. Él y su lista (Celeste y Blanca -CyB-) actúan con planteos abiertamente patronales y son los de estas ante los trabajadores de la sanidad.

Esto es lo que ha sucedido, por ejemplo, en los primeros días de abril cuando Laboratorios Hidalgo y Centro Rossi pagaron el 70% del salario aduciendo “futuras pérdidas” (nada más lejos de la realidad porque ambos, del mismo dueño, realizan los tests de Covid-19 para las prepagas). La Celeste y Blanca agachó la cabeza y propuso “esperar”. A pesar de la pasividad de los delegados, las y los trabajadores de ambos centros empezaron una campaña de denuncia por las redes que rápidamente se viralizó. El resultado de la campaña por abajo fue la restitución del salario, mientras que la Celeste y Blanca que nada hizo contra la patronal se dedicó a una “cacería de activistas” tratando de infundir temor entre trabajadores y trabajadoras.

Luego tenemos la experiencia en Soma, un neuropsiquiátrico donde la patronal retrasó el pago del salario y aguinaldo por varios meses, con condiciones de superexplotación a enfermeras y el resto del personal. Allí, ante las asambleas y planes de lucha que votaban les trabajadores, apareció una representante directa del sindicato que por supuesto pidió calma a les compañeres para darle tiempo a la patronal. Una de las principales activistas fue despedida, una vez más la burocracia sindical “le hizo el ole” a la situación con un silencio estampa. La clínica fue clausurada dos días después del despido antisindical porque funcionaba ilegalmente hacía meses con una clausura por abandono de persona.

Hace un año, como respuesta a un boletín de la Naranja de Sanidad (que denunciaba que ante el despido de nuestro compañero Nicolás Pozik en Laboratorios Andrómaco, la Celeste y Blanca no había hecho nada por la defensa del compañero) la CyB organizó una suerte de solidaridad entre delegades de laboratorios por las supuestas difamaciones nuestras. La realidad en Andrómaco y en otros laboratorios son un botón de muestra que confirma que la orientación de la CyB en el sindicato es la de la colaboración con la patronal, al activismo lo tratan de tirar a la banquina.

Ya en tiempos de pandemia, ante todo tipo de desidia patronal (Italiano, Güemes, Otamendi, etc), la posición de Daer y la Celeste y Blanca es un silencio sepulcral. Deberían estar en los establecimientos a la cabeza de la defensa de la vida de cada una y cada uno de nosotros. Sin embargo, ante una reciente denuncia de que en el Sanatorio Franchin, la ART está mandando a trabajar a compañeres sin el alta de coronavirus, la burocracia sindical comenzó una activa campaña para defender a la patronal del Franchin y comenzar una nueva “búsqueda de responsables”.

No debería sorprendernos que la política de capitulación contra la patronal sea fomentada y aplaudida por el propio Alberto Fernández, después de todo el gobierno nacional amagó con la centralización del sistema de salud y se escondió debajo de la cama ante la presión de las patronales privadas; cacareó con el impuesto a las grandes fortunas y hasta el momento el único proyecto presentado es el del Frente de Izquierda-Unidad; dijo que iban a expropiar Vicentin y ahora declaró que estaba arrepentido. Finalmente el gobierno retrocedió en chancletas ante la ofensiva patronal en toda la línea. Similar orientación capituladora llevan adelante West Ocampo, Daer y Pokoik en sanidad que con la excusa de defender los puestos de trabajo ha retrocedido en toda la línea.

Esta orientación canallesca se opone por el vértice a lo que representamos las y los compañeros de la Naranja de sanidad, consideramos que el sindicato es una herramienta para defender nuestros intereses y no los de las patronales. Por eso mismo, llamamos a los y las delegadas de la Celeste y Blanca que se autoperciben honesto/as y luchadores a pelear y romper contra esta orientación rastrera de los capitalistas.

La política de Daer y la CyB solo le abre paso a los ataques patronales, en el marco de una crisis sin precedentes, que ya están demostrando en qué consisten: trabajo precarizado, salarios aún más bajos, polifuncionalidad, reforma laboral, todo esto en el marco de récord de contagios y víctimas del Covid-19.

La lucha por sobrevivir a la pandemia arroja como primera conclusión que necesitamos una nueva dirección en el sindicato de la sanidad: por comités de bioseguridad integrados y dirigidos por los trabajadores; por la centralización del sistema de salud; por la reincorporación de todas y todos los despedidos por luchar.