El gobernador Solá acaba de vetar la ley de expropiación de Sasetru. La decisión coincide con vetos similares a la clínica de Lavallol, a la fábrica de jugos Suin y a otras dos empresas del Gran Buenos Aires. El fundamento utilizado en todos los casos es el mismo: la falta de presupuesto.

El argumento es llamativo. Estas leyes no pasan de una declaración de utilidad pública y no implican un compromiso efectivo de concretar la expropiación. Hasta el día de hoy, nos vamos acercando al centenar de expropiaciones pero el gobierno de Sola no ha puesto un peso para comprar las fabricas.

Por otra parte, las leyes plantean un lapso de cinco años para concretar las expropiaciones. La excusa de que no hay recursos en el presente ejercicio no sirve. Además, las expropiaciones no son un regalo; son a título oneroso, es decir, que los trabajadores están obligadas devolverle al estado lo que éste hubiera adelantado.

La razón del veto hay que buscarla en otro lado. Solá, que había dado un guiño a la bancada oficialista para aprobar estas leyes, pegó un giro en momentos que han entrado en colapso las finanzas provinciales. Los vetos se inscriben en esta intransigencia y recorte general que el gobierno provincial está promoviendo con los reclamos sociales, al mismo tiempo que utiliza esa hecho como un fantasma para agitar las aguas y como factor adicional de presión hacia el gobierno nacional en vista a arrancar un auxilio económico a la provincia .Solá necesita contar mas que nunca con un caja superavitaria , más ahora que entra en la cuenta regresiva por su sucesión.

Llamamos a redoblar la movilización por la defensa de las fábricas recuperadas, para terminar con la precariedad legal y exigir sus expropiaciones definitivas y sin resarcimiento económico a los patrones, por subsidios no reintegrables para ponerlas en marcha y hacerlas producir, para poner fin a la autoexplotacion y luchar por un salario equivalente a la canasta familiar.

La denuncia del veto y el reclamo de la expropiación de Sasetru fue colocada en la agenda de la multitudinaria movilización piquetera del 4 de agosto a La Plata. Llamamos a profundizar ese camino y formar un frente común de todas las fábricas recuperadas en torno a este programa.