Sindicales

3/10/2020

Schiaretti y el Ministerio de Trabajo, garantes de los despidos en Córdoba

En los primeros meses de la cuarentena se perdieron en Córdoba unos 20.500 empleos privados. El indicador de todos los trabajadores registrados (la suma del empleo privado, el público, en casas particulares y monotributistas) sufrió una contracción interanual de 4,7%. El aumento de la ocupación en junio del orden 0,3%, en comparación con mayo, fue producto de un aumento en monotributistas, lo que vendría acompañado de una mayor precarización laboral.

En la construcción se perdieron más de 7.000 empleos, y desde la UOM aducen tener fuertes pérdidas de puestos de trabajo mientras siguen sin respuestas por parte del Ministerio de Trabajo de la provincia. El secretario general de la UOM, Rubén Urbano, calificó de “lamentable” la actuación de esta cartera, cuya ausencia no deja a los trabajadores otra alternativa que “ir al conflicto”, con los riegos sanitarios que esto implica. Urbano se preocupa por evitar la movilización de los trabajadores ante los despidos, supuestamente por los contagios, pero no dice ni una palabra de las condiciones de insalubridad y los riesgos sanitarios en las fábricas ni en el traslado hacia los establecimientos.

En este contexto de pandemia, las patronales han redefinido su estructura de costos a través de la reducción salarial, y con la reestructuración de las plantas y de personal-es decir despidos-, con la complicidad del gobierno y de las burocracias sindicales.

En este marco, de aumento de la pobreza y desocupación, es cada vez más necesaria la intervención de la clase obrera, con un programa propio y un plan de lucha contra los despidos, por aumento salarial y condiciones laborales, en la perspectiva de que la crisis la paguen los capitalistas. Ante la completa entrega de las burocracias sindicales, es necesario impulsar una acción independiente contra el deterioro de las condiciones de vida de las y los trabajadores.