Se formó la Gris-Bordó para expulsar a Pedraza del ex Roca

El 9 de agosto se realizarán las elecciones de cuerpo de delegados del estratégico FFCC Roca. Será, sin duda, una gran batalla contra la patota asesina de Pedraza y Fernández, así como una referencia para todos los trabajadores ferroviarios y para el movimiento obrero. Los compañeros entrevistados han jugado un rol de enorme importancia en una de las grandes luchas del último período como fue el pase a planta de los tercerizados y el esclarecimiento del crimen de Mariano Ferreyra. Sus respuestas muestran la enorme lucha librada, donde ellos han sido, sin dudas, algunos de los principales protagonistas.

Con Pedraza preso, la elección del Roca será el segundo gran acontecimiento electoral sindical del año, después del enfrentamiento Cavalieri-Moyano en Comercio.

¿Qué agrupamientos se presentan en el ex Roca?

De un lado, claro, está la Verde de Pedraza. La Azul, manejada por supervisores que han estado asociados a la Verde, se ha juntado con un grupo “camporista” armado desde los despachos del Ministerio de Desarrollo Social. Como se ve, hay una crisis de la burocracia y un intento de reciclamiento. El gobierno K se encuentra dividido, pues Transporte y parte de Trabajo apoyan a la Verde. Ugofe, la patronal de la línea, apuesta al recambio Azul-La Cámpora; ésta última ha pasado, por orden del ala ‘cristinista’ del gobierno, del pedido de juicio y castigo a los asesinos de Mariano al maridaje con un sector propatronal con lazos con la Verde.

A diferencia de Comercio, donde el activismo emergente no reunió las condiciones para pelear el sindicato, en el Roca se ha formado un vigoroso frente clasista encabezado por Causa Ferroviaria, nada menos que la agrupación de los compañeros de Mariano Ferreyra. Causa Ferroviaria acaudilló cuatro movimientos: el de la lucha por la cárcel de Pedraza, el de todo un sector de tercerizados por el pase a planta, el de la bolsa de trabajo contra la agencia de empleo de barrabravas que montó la Verde, el del servicio sanitario y la reorganización de los talleres de Remedios de Escalada. Al mismo tiempo, denunció sistemáticamente la paritaria amañada, manejada por el ministro Tomada y los socios de Pedraza.

Desde ese lugar, Causa Ferroviaria planteó, luego de haber completado una lista propia de candidatos, un frente para recuperar el Roca de las manos de la burocracia asesina, sin ningún compromiso con aquéllos que se han distanciado falsamente para reciclarla.

El color gris adoptado por Causa Ferroviaria Mariano Ferreyra es un señalamiento de que la agrupación se prepara para intervenir en la elección nacional del sindicato (donde cada tendencia se distingue por el color) con su propio planteo de independencia de clase (puesto que los colores valen en elecciones de sindicato no de cuerpo de delegados), sin compromisos oportunistas con supervisores o grupos que pretenden reciclar a la burocracia pedracista en las condiciones que surgieron luego del asesinato de Mariano.

Causa Ferroviaria reclamó a los activistas de la lista Azul a que se avinieran a formar un frente con exclusión de sus direcciones comprometidas con Ugofe y la Verde, y buscó un frente independiente de la burocracia con la Blanca (Cámpora). Planteó la necesidad de echar a los de Pedraza sin otra condición que la ausencia de compromisos o ligazones con el pedracismo y la patronal, con un programa común de democracia sindical -funcionamiento del cuerpo de delegados, asamblea general- y la independencia de clase del sindicato.

La propuesta de un frente incluyó, en especial, a la agrupación Bordó del Roca -independiente de la burocracia. Esta propuesta, parte del planteo general, suscitó un debate al interior de las filas de Causa Ferroviaria, debido al boicot de la Bordó al piquete del 20 de octubre y a su política faccional para expulsar a los compañeros de Mariano del movimiento de los tercerizados. En el debate predominó, como cabía esperar, una caracterización más amplia (o menos unilateral) de la Bordó y la necesidad suprema de poner fin a la burocracia pedracista en el ex Roca. Es así que llegamos a la formación de un frente con potencial para recuperar el cuerpo de delegados de los casi 5 mil trabajadores del Roca. La lista quedó encabezada por Jorge Hospital, dirigente de Causa Ferroviaria.

Se trata de una batalla estratégica para el movimiento obrero de todo el país. No será fácil: se trata de derrotar a un entramado burocrático-patronal-estatal que hace un uso intimidatorio y extorsivo de la oficina Recursos Humanos (Personal). Pero el hecho de que 25 candidatos de la lista pertenezcan a los talleres de Remedios de Escalada, donde se armó la patota asesina de Mariano, habla por sí mismo del nivel de la reorganización que se ha desarrollado desde la propia base.

La victoria del Frente de Unidad Ferroviaria Gris-Bordó abriría una nueva situación en toda la Unión Ferroviaria. Y un nuevo escalón en la transición hacia una nueva dirección del movimiento obrero.