El día 9 de diciembre se realizó en Neuquén el encuentro de fábricas recuperadas, convocado por los obreros y obreras de Zanón. Junto a los anfitriones, estuvieron presentes delegaciones del Bauen, de la Cooperativa “19 de Diciembre”, de Brukman, de Renacer (Ushuaia), de la Cooperativa “Unidos por el Calzado” (CUC), de Textiles Pigüé, de la Cooperativa de Transporte “El Salvador” (Jujuy), de Sasetru Gestión Obrera y de los compañeros despedidos del frigorífico Yaguané (ver PO 1020). Enviaron adhesiones los docentes de Aten Plottier, los centros de estudiantes de Bellas Artes y del CPEM 23, la APDH de Neuquén y el Bloque del “Ari Autónomo”, entre otros.

Panorama

Los informes de cada delegación presentaron el panorama que describe a la inmensa mayoría de las empresas recuperadas que existen en el país: vencimiento de las “expropiaciones transitorias”, falta de subsidios, salarios por debajo de la canasta familiar e incluso de los mínimos de convenio, intimaciones de desalojo, procesos judiciales contra sus trabajadores, etc.

Hubo coincidencia en la caracterización de que existe una ofensiva política, judicial y económica por parte del Estado y las patronales para retomar el control de las empresas o para hacerle pagar a los trabajadores, que las rescataron del quebranto, un resarcimiento a los vaciadores.

Programa y campaña

La delegación de Sasetru, encabezada por Pablo Heller y por Víctor Vázquez —responsable del área de producción, presentaron los lineamientos generales de un programa para dar una respuesta de conjunto a la ofensiva capitalista. En primer lugar, la expropiación sin pago de las empresas y su entrega gratuita a sus trabajadores; en segundo término, la aplicación de recursos estatales y subsidios no reintegrables para la capitalización de las empresas y la modernización de sus maquinarias. En tercer lugar, la conformación de un fondo salarial que garantice un sueldo de convenio y, progresivamente, el equivalente al costo de la canasta familiar. También plantearon, sobre la base de este programa, convocar al conjunto de las empresas recuperadas para poner en marcha una campaña de conjunto. Se trata de abrir un debate y homogeneizar política y reivindicativamente a un movimiento que se encuentra en una encrucijada.

El Encuentro discutió el punto peró concluyo sin ninguna definición al respecto. La delegación de Zanón se opuso a avanzar en esta dirección. Planteó que había que “aguardar la opinión” de “otras cooperativas”. Pero las cooperativas a las que se hace referencia se encuentran bajo la dirección de elementos afines al gobierno o bajo la tutela del Estado. Es un sector que tiene como línea retener las fábricas a “titulo oneroso” (es decir, que los trabajadores la compren). Es una salida para un 10 o quizás un 20 por ciento de las empresas recuperadas, aquellas que están más reactivadas y en condiciones económicas mas favorables (aun así no deja de ser una espada de Damocles, para ese grupo minoritario de empresas). Han presentado proyectos de leyes de expropiación que son inviables para el 80 por ciento de las empresas bajo gestión obrera y aun funcionales a un copamiento capitalista de las mismas. El endeudamiento que promueve para la compra de la fabricas por parte de sus trabajadores es el terreno ideal para forzar la asociación con grupos empresarios o el desembarco de capitales privados.

Zanón, por su parte, plantea — como lo señala la propia convocatoria del encuentro – “una ley nacional de expropiación”, sin especificar si es con indemnización ni quién debería pagarla, ni tampoco la responsabilidad que debe asumir el Estado en asegurar la financiación de la empresa recuperada (es diferente al proyecto que se ha planteado para Zanón a nivel provincial). El proyecto nacional deja abierta la posibilidad de un compromiso en el caso de que los términos de un resarcimiento a cargo de los obreros sean adecuados. Pero aún si esta eventualidad de un compromiso semejante pudiera ser contemplada, ello no es motivo para frenar una campaña nacional por la expropiación sin pago, a puro costo de los vaciadores. Esta campaña trazaría una perspectiva de conjunto y reforzaría las posiciones de los trabajadores de las empresas recuperadas para cualquier compromiso que favorezca a los trabajadores.

Como consecuencia de la ambigüedad de la delegación de Zanón, no salió ninguna campaña del Encuentro, que se redujo a oficiar como factor de presión de los reclamos de Zanón de cara al nuevo gobierno de Neuquén.

Resoluciones

El Encuentro resolvió acompañar a los compañeros de Zanón en la movilización que realizarían al día siguiente para su proyecto de expropiación sin pago y estatización de la fábrica en la legislatura neuquina (hecho que repetirán el próximo 20 de diciembre en el Congreso Nacional) y la convocatoria a un próximo encuentro a realizarse a mediados de febrero en la ciudad de Buenos Aires, con el objetivo de avanzar en la elaboración de un programa y en el contenido de una ley nacional de expropiación que beneficie al conjunto de las recuperadas.