El jueves 16 se concretó la reunión de coordinación de la que participaron el Suteba Ensenada, varias juntas internas combativas de ATE , cuerpos de delegados de Adulp de Agronomía y Arquitectura, la Multicolor del Suteba la Plata , el Polo Obrero, agrupaciones del Astillero Río Santiago, centros de estudiantes y delegados de reparticiones estatales y de la salud. La treintena de intervenciones dieron cuenta de un amplio y rico debate que tuvo como eje la intervención de los trabajadores en la crisis y el control popular. La propuesta de documento girada por el Consejo Ejecutivo Seccional del Suteba Ensenada a todas las organizaciones participantes ofició como marco general del frente único del sindicalismo combativo de la región de La Plata, Berisso y Ensenada. 

En la reunión hubo coincidencia en “impulsar la organización de los lugares de trabajo y estudio “para defender una política unitaria de la clase obrera frente a la crisis sanitaria, social y económica “. El documento es muy preciso en la denuncia de los costos de esta catástrofe en la Argentina y en el mundo “que se miden por el número de víctimas e infectados pero también por las políticas de ajuste, el pago de la deuda usurera y fraudulenta, las reformas anti jubilatorias que exige el FMI, el crecimiento de la miseria social y la pobreza, la desocupación, la precarización laboral, y el avance de la privatización de la salud.” ¡Una denuncia del gobierno de Alberto Fernández y de todos los regímenes capitalistas!

Programa y cuarentena

En el debate, la gran mayoría de las organizaciones denunciaron al gobierno de Alberto Fernández como un obstáculo para enfrentar la pandemia del coronavirus y sostener la cuarentena como protección frente a la propagación del virus.. El peronismo en el poder representa los límites que imponen el capital y sus ganancias a un país saqueado por el FMI y los bonistas. Por eso el documento incluye en su programa la lucha por un plan económico bajo el control de los trabajadores; el no pago de la deuda externa de jurisdicción local y extranjera; la ruptura con el FMI; los impuestos extraordinarios a los grandes patrimonios y a las altas rentas, y la nacionalización de los hidrocarburos, la banca, el comercio exterior y todos los recursos estratégicos.

 

La importancia del programa fue destacada por distintos oradores y por las agrupaciones de la Coordinadora Sindical Clasista (PO) que participó con una amplia delegación de docentes, estatales, del Polo Obrero, de la agrupación de repartidores ATR, Astillero Río Santiago y docentes universitarios. Nuestras agrupaciones clasistas fueron un motor de esta iniciativa tomada por el Suteba Ensenada. Que haya sido Suteba Ensenada el convocante a la coordinación dice mucho de una trayectoria y autoridad como sindicato combativo de la región, pero también sobre la defensa consecuente de la Multicolor de la cuarentena en las escuelas frente a las presiones por romper el aislamiento obligatorio (en plena cuarentena Sonia Alesso, secretaria general de la Ctera propuso discutir la suspensión de clases). Le cupo al Suteba Ensenada y a su Cuerpo de Delegados organizar desde un inicio las guardias mínimas y voluntarias para no exponer a la docencia y a la comunidad educativa a la circulación del virus y el contagio.

 

El programa debatido en la reunión de coordinación regional es de indudable interés para todo el movimiento obrero combativo, y sienta un precedente para toda política clasista y un curso de acción para luchar por una ley de prohibición de despidos y suspensiones, por el seguro al desocupado de 30.000 pesos, el control obrero, en apoyo a las luchas obreras, y por una transformación social bajo la dirección de los trabajadores Es una respuesta desde la clase obrera al gobierno peronista que sigue pagando la deuda usurera en la pandemia y que formuló una propuesta a los bonistas de rescate de los títulos basura.

Comités de seguridad e higiene y control popular

Un punto destacado de la reunión de coordinación fue la denuncia de las presiones capitalistas y de las direcciones de la CGT y las CTAs que ya han impuesto en parte el levantamiento de la cuarentena de común acuerdo con el gobierno. La “cuarentena administrada” y la “cuarentena focalizada” confirman que se trata de una política promovida desde el gobierno nacional en acuerdo con gobernadores e intendentes. En la reunión se destacó el accionar del Sutna clasista denunciando la excepcionalidad dispuesta para las patronales del neumático (estas fábricas no son un servicio esencial) y la importancia de un protocolo obrero para que los trabajadores fijen requisitos en materia de seguridad, higiene, prevención y condiciones de trabajo y producción.

Distintos oradores compartieron la necesidad de poner en pie los comités de seguridad e higiene en todos los lugares de trabajo, escuelas y barriadas. Especialmente en los hospitales que han pasado a ser un foco infeccioso por la cantidad de trabajadores de la salud contagiados, y que en la región alcanzan a un tercio del total de infectados. Todas las denuncias de médicos y enfermeras apuntan a la falta de elementos de seguridad y protección lo que es una consecuencia directa del ajuste en salud y del vaciamiento del hospital público. Entre las conclusiones de la reunión se destacó la lucha por un sistema único de salud, la centralización del sistema sanitario, el aumento del presupuesto y de las plantas de trabajadores.

En esta campaña por los comités de seguridad e higiene SUTEBA Ensenada tiene mucho que aportar. Las comisiones de infraestructura del sindicato han luchado por hacer cumplir los 12 puntos de escuelas seguras de CTERA junto al control de las obras , la provisión de agua, gas, electricidad . Los comités de seguridad e higiene representan una continuidad de esta política de control obrero aplicada a la educación y contra el ajuste educativo. En el Cuerpo de Delegados del SUTEBA Ensenada se votó lanzar la constitución de estos comités por escuela, zona y barriada junto a la comunidad educativa para “elaborar los protocolos de bioseguridad", hacer cumplir la cuarentena, controlar el servicio alimentario escolar y organizar los reclamos al gobierno, al municipio y al Consejo Escolar.

Los comités de seguridad e higiene como órganos de control obrero y acción son también una respuesta a los comités de crisis oficiales que actúan como prolongaciones de los gobiernos municipales y como contención y freno a los reclamos contra el hambre, los despidos, y el hacinamiento en las barriadas. El compañero del Polo Obrero denunció las condiciones de desabastecimiento alimentario en que se encuentran los comedores de las organizaciones piqueteras y propuso sumar a las campañas de la coordinación la exigencia de la duplicación de la asistencia a los comedores y el pago ya y sin discriminación del subsidio IFE, que tampoco llega a los migrantes.

Estos comités cobran gran importancia para el Astillero Río Santiago. Desde Tribuna del Astillero se propuso impulsar su constitución en la fábrica y un plan reconversión del ARS bajo control de los trabajadores y en base a un protocolo obrero para destinar la producción al combate de la pandemia. Esta política de la clase obrera contrasta con los “voluntariados” sin condiciones de seguridad e higiene y limitados a la entrega de bolsones del municipio que promueven la empresa y la conducción de ATE Ensenada. 

 Apoyo a las luchas y reclamos obreros

La Junta Interna de ATE Educación y delegados de Vialidad destacaron la importancia de votar un plan de acción por los 56 despedidos de la Dirección General de Escuelas y la reinstalación efectiva de los trabajadores de Vialidad. Estas medidas incluyen un fondo de lucha que impulsa la junta clasista de ATE Educación y de denuncia de los despidos por las redes que tomaran también las organizaciones de esta coordinación de trabajadores. Ante el anuncio de suspensiones con recorte salarial en Siderar Ensenada se hizo hincapié en una campaña unitaria y regional para exigir el pago íntegro del salario y la prohibición efectiva de los despidos y las suspensiones. Estas campañas en apoyo a los reclamos y a las luchas obreras son fundamentales cuando arrecian los despidos, las suspensiones y rebajas del salario de las que se valen los capitalistas para descargar la crisis sobre los trabajadores. Con esta política de clase se votó el apoyo activo al paro del 22 de abril de los repartidores a domicilio y jóvenes precarizados y una difusión en los lugares de trabajo.

Todas las organizaciones que respaldan el documento apoyaron también el reclamo de extensión del subsidio a los docentes desocupados y subocupados por un monto que no debe ser inferior a la canasta básica, y una campaña especial en defensa de los trabajadores de la salud que están expuestos al riesgo del contagio por las nulas condiciones de seguridad que hay en hospitales y clínicas privadas. . 

Contra la represión

El documento propuesto por el SUTEBA Ensenada es contundente en la denuncia de la prepotencia policial, la intimidación en las barriadas convertidas en guetos acordonados por la Bonaerense y la gendarmería, y la lavada de cara a las FFAA para “dar vuelta la página” en otro capítulo de la impunidad a los genocidas y represores. La defensa de la cuarentena debe basarse en la organización de los trabajadores y los barrios sobre la base de un programa de independencia política de la clase obrera y de control popular de la pandemia. Correctamente se denuncia que con hambre, despidos y hacinamiento, la cuarentena no puede sostenerse frente a la presiones de los capitalistas que descargan la crisis sobre los trabajadores

La nota discordante la dieron quienes impugnaron el documento porque denuncia la presencia de la policía y el ejército en las barriadas como instrumentos de control y represión de los reclamos obreros y populares como lo hace el comunicado de Memoria Verdad y Justicia ante el ciberpatrullaje. Pretender que estas fuerzas represivas están para “hacer cumplir tareas de asistencia social que otros no pueden garantizar”, como afirman Alberto Fernández, la burocracia sindical, y el grupo de Altamira, es una puñalada por la espalda a la lucha de los obreros de Penta y a los trabajadores de la carne que fueron al paro contra los despidos y la represión de Berni y su bonaerense. ¿Acaso se puede defender y sostener una cuarentena sin luchar contra los despidos, las suspensiones y la rebaja de los salarios o sin luchar por el seguro al desocupado no inferior a la canasta básica? La renuncia a un programa de los trabajadores es una capitulación directa ante el peronismo y Alberto Fernández. Más absurda fue la ultraminoritaria oposición a título individual a una ley de prohibición efectiva de los despidos con estabilidad laboral mínima de un año y pago del salario al 100%. Directamente una agachada frente al DNU de Alberto Fernández que es un colador y que las patronales violan a diario con total impunidad. El obstruccionismo faccional es letal para el frente único de la clase obrera contra el capital y sus gobiernos.

Sobre la base del debate y con las campañas y agregados se giró el documento final para la firma de todos los participantes en la reunión de coordinación de trabajadores.