Sindicales

30/6/2005|906

Siguen las huelgas y cortes en el norte de Santa Cruz

Kirchner y Acevedo violan los derechos humanos

El gobernador Acevedo y el secretario general del sindicato municipal de Caleta Olivia han sido citados a la Casa Rosada para tratar “en el máximo nivel” las luchas en el norte de Santa Cruz.


En Pico Truncado, una movilización de 2.500 trabajadores y vecinos reclamó el martes 28, la libertad de los presos y el cumplimiento del acta acuerdo por el salario. Mientras el Intendente alega que sufrió una extorsión para firmar el acuerdo, “los medios de prensa estuvimos presentes cuando se firmó el acta, el Intendente no estuvo en ningún momento presionado, tuvo tiempo de ir a su casa y bañarse, estando los periodistas de testigos, podría haber mencionado que estaba coaccionado para firmar el Acta”, afirmó una periodista de FM “Kaikeña”.


En Caleta continúa la huelga, la ocupación de las reparticiones municipales y el corte de ruta. Existen órdenes de detención para los dirigentes y activistas de la huelga. Se prepara una asamblea general para tratar una propuesta de la Intendencia (300 pesos en negro, asignaciones familiares de 80 a 120 pesos por hijo, pase a planta permanente de los contratados con más de cinco años de antigüedad, 70 y 50 pesos para los planes) que no satisface los reclamos.


La lucha sigue. No bastó la conciliación obligatoria, no bastaron los ataques hacia los trabajadores de todo el arco oficialista de Santa Cruz. No bastó mentir una y otra vez para demostrar que el presupuesto municipal o provincial “no alcanzan” para dar aumentos al básico. No bastó la Gendarmería que plantaron en Truncado y que el pueblo echó a pedradas. El gobierno nacional y popular, el gobierno del “hijo de las Madres”, el gobierno que recuerda las “bombas del ‘55 en Plaza de Mayo”, el gobierno que “lucha” contra las violaciones a los derechos humanos en el ‘76, se empeñó el último fin de semana, con las detenciones, con la persecución para quebrar la gesta de los municipales de la zona norte de Santa Cruz.


“No hay fondos”


En Caleta, una mesa de negociación en la Iglesia, como ámbito “neutral”, y con la presencia de los presidentes de las Uniones Vecinales, fue utilizada para presionar a los dirigentes gremiales para que redujeran los reclamos y levantaran el corte de ruta. Fueron ocho horas de negociaciones, luego de las cuales las Uniones le mandaron una carta a Acevedo para que envíe fondos; cerca de la medianoche, la respuesta del gobernador fue contundente: no hay plata para Caleta.


Al mismo tiempo, la Policía insistía en el piquete con la intimación del juez a abandonar la ruta en una hora. A medianoche, ni el viento helado del sur cortaba el ambiente. En el Sindicato de los Municipales, una guardia de trabajadores de la multisectorial custodiaba las instalaciones, en la Iglesia una multitud hizo el aguante a los dirigentes perseguidos, sacados del lugar en una caravana de más de 60 autos, para evitar que sean detenidos. En una asamblea en plena ruta se informó lo actuado y se votó continuar la lucha. Fue el momento más intenso, emocionante.


El gobierno se jugó a descabezar la dirección de la lucha para quebrarla. La unidad y la firmeza de los trabajadores lo ha evitado, por el momento. Los delegados electos por asamblea que integran la mesa de discusión salarial, han flexibilizado el reclamo de aumento al básico, llevándolo de 200 a 100 pesos.