Las autoridades de Subterráneos de Bs As Soc. Del Estado (SBASE), esto es, del gobierno de Rodríguez Larreta, propuso prolongar a más de 6 horas la jornada de parte del personal para cubrir los puestos de los trabajadores licenciados por prevención de coronavirus. Medida que afectaría mayormente a tráfico (conductores y guardas) pero también a parte de talleres y estaciones. La mayoría de la conducción de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro impulsó esa propuesta totalmente improcedente con argumentos extorsivos, como la amenaza de una declaración de “servicio público imprescindible”.

Cuando todas las recomendaciones sanitarias indican “distanciamiento social” se pretende prolongar la jornada laboral y por lo tanto el tiempo de exposición de los trabajadores en un medio donde las condiciones ambientales son deplorables: baja ventilación e iluminación, alta humedad, presencia de mosquitos y otros contaminantes – ¡nada menos que el asbesto! Un lugar de riesgo para la trasmisión de enfermedades infectocontagiosas. Por otra parte, no menos importante, significaría transgredir la jornada de 6 horas, cuyo fundamento es precisamente las condiciones de insalubridad en el subte que costó una lucha obrera de 10 años.

Los delegados y trabajadores de tráfico de la línea B se opusieron frontalmente al cumplimiento de esa medida y, a continuación, también los de las líneas A y la C. En otras líneas y en general en las bases se manifestó también una fuerte resistencia, al punto que hasta el momento no se ha aplicado. Obviamente, la nueva situación de la cuarentena nacional viene a introducir modificaciones que deberán ser seguidas de cerca por el colectivo obrero. Los delegados de tráfico de la B emitieron un comunicado que, entre otras cosas planteó: “Llamamos a la reflexión a todos los compañeros para no aceptar medidas que pongan en juego nuestra salud, la de los pasajeros y las conquistas históricas de los trabajadores del subte”.