Sindicales

17/10/2020

Suteba Quilmes: ¿por qué la Azul y Blanca aceptó la paritaria a la baja de Kicillof?

Secretario de Jubilaciones Suteba Quilmes Multicolor

La seccional Quilmes de Suteba (gremial docente bonaerense) es conducida por la Lista Multicolor, opositora a la dirección provincial de  Roberto Baradel. No obstante, en los últimos años la agrupación mayoritaria del Suteba Quilmes (Azul y Blanca-PCR) fue alejándose de las acciones, métodos y reclamos que colocamos en toda la provincia desde la Multicolor.

Esto fue más claro en los últimos meses, donde se llevaron adelante todas las demandas docentes, que son de público conocimiento. Este alejamiento lleva a la seccional al campo del gobierno, a la pérdida de su independencia política, como quedó claro con la aceptación por parte de la misma, días atrás, de la oferta paritaria ajustadora del gobierno de Axel Kicillof.

La reunión

Desde un principio el planteo de la Azul y Blanca-PCR fue que reclamar al gobierno era “hacerle el juego a la derecha”. La última reunión de delegados fue convocada seis horas antes de que el gobierno tirara una “nueva oferta”, y realizada con una casi nula participación de delegados de base. En este cuadro, la moción de aceptar la propuesta ganó por 43 votos, contra 13 que rechazamos este acuerdo a la baja.

De esa manera la Azul y Blanca votó en igual sentido que la burocracia de la Lista Celeste de Baradel y el resto de las fuerzas que integraban su frente en el 2013 (Granate-Violeta-Marechal). Conformando, de esta manera, un bloque con la misma burocracia que acechó la seccional en el 2013 para llevarla al carro del gobierno. Se trata de un paso más en una política derivada de la integración del PCR al Frente de Todos.

El aumento del “35%”

En la reunión previa a aceptar el acuerdo, la Azul y Blanca sostuvo que “el aumento es del 35% y no está mal”, que “otros trabajadores están peor” y que “tenemos que ser solidarios” y  “tener en cuenta el contexto y la pandemia”. A su turno, instó a “no olvidarnos” del ajuste de Macri y Vidal (como olvidar contra lo que hemos luchado tanto), afirmó que “el gobierno está tomando buenas medidas, pero limitadas” y que “no hay ajuste en educación” -una suerte de buen gobierno con limitaciones que debemos cuidar porque podría ser peor. Incluso, la agrupación manifestó que “Macri tiene el poder, no Alberto”.

Lo primero que debe señalarse es que no es un 35% de aumento.

Lo que brinda el gobierno en esta segunda etapa parte de $1.418 hasta un máximo de $2.000 para un preceptor/a; de $1.941 a $2.621 en el caso de una maestra de grado; y de $10170 hasta un máximo de $1.740 en el de un profesor/a. Con este aumento, los docentes deberán vivir hasta el mes de diciembre -esto porque la segunda cuota se cobra en enero- con sumas que merodean de $1.500 a $4.000, dependiendo del cargo y la antigüedad. En lo que respecta a asignaciones familiares, el aumento va desde $600 hasta $110 (dependiendo del total del ingreso familiar). Una paritaria que merodea el 16%, cifra similar a la de marzo (16,6 %).

En rigor, entonces, sería un aumento anual del 31% recién en enero del 2021, porque en estos meses el mismo fue menor: 8,9% de marzo hasta junio, 7% de julio hasta septiembre, 6,5% de octubre a diciembre y 8,6% en enero del 2021.

Por donde se lo mire es una suma insuficiente, que deja a toda la docencia debajo de la línea de pobreza -que estaba en más de $45.000 en el mes de agosto, antes de que se aplique el cepo del cepo y se abra una nueva escalada inflacionaria- hasta el 2021 inclusive.

El ajuste en educación existe

El presupuesto educativo del Frente de Todos es el de Vidal del 2019, ya que este se prorrogó. Es la base del ajuste.

Es así como los principales reclamos docentes no están satisfechos. Los actos virtuales de tomas de cargos dejaron todo un tendal de compañeros disconformes, porque no accedieron a cargos -ya sea por los  altos puntajes, por el desgano a la hora de hacer un reclamo o porque no fueron atendidos. Esto ocurre en toda la provincia; el trabajo cotidiano de una seccional nada en un mar de ajuste.

Tampoco fueron atendidos los reclamos del Servicio Alimentario Escolar (SAE), ni existe un plan de infraestructura para la vuelta a clases, ni se garantizó internet para la conexión a los alumnxs y docentes.

No conforme con esto, el gobierno de Kicillof pone a docentes precarizados (del programa Piedas) y estudiantes a “recuperar” alumnos que él mismo abandono durante toda la pandemia. Fuera del estatuto docente, por presión de volver a clase sin importar las condiciones, expone a todos un sector de docentes y futuros docentes. No existe la menor preocupación pedagógica si no se realizan las obras de infraestructura necesarias, si no se cubren los cargos faltantes, si no se garantiza conectividad.

El Programa de Acompañamiento a las Trayectorias y la Vinculación (ATR) es un ensayo brutal de reforma laboral docente.

El frente de todos gobierna para el FMI

El argumento de que Macri tiene el poder y Fernández el gobierno solo sirve para excusar a este de las medidas que toma. Convalida el fraude de deuda con el FMI y los subsidios a las patronales (más de la mitad del presupuesto ejecutado fue para estos dos aspectos); la devaluación de más del 100% del peso, las excepciones impositivas a los capitalistas, los desalojos y la represión a las familias que luchan por la vivienda, los casos de gatillo fácil en toda la provincia.

Estas fueron las principales medidas con las que se encontraron los 6,4 millones de pobres del gran Buenos Aires, y los 1,7 millones de indigentes. El pago de las ATP fue subsidio a las patronales, mientras que el Ingreso Familiar de Emergencia significó un suspiro en este brutal ajuste. No basta con recordar con que son insuficientes. El impuesto a las grandes fortunas del Frente de Todos cada vez implica una menor recaudación de estas patronales, que fueron por demás beneficiadas con recursos del Estado.

El brutal ajuste de Macri-Vidal continúa casi intacto. Las medidas de Alberto no son “limitadas”: corresponden a una orientación de ajuste que defienden y sostienen.

Coloquemos las demandas docentes, accionemos y defendamos su lucha

Este camino de integración  al gobierno por parte de la Azul y Blanca y el PCR, lleva a una negación (en los hechos) de estos problemas fundamentales que sacuden a los docentes y a los trabajadores; aleja al Suteba de los problemas del gremio. No basta con decir que se acepta críticamente, porque en este caso la aceptación misma impugna la crítica y aleja cualquier perspectiva de lucha.

Desde Tribuna Docente llamamos a los docentes de Quilmes y afiliados a Suteba a prestar atención a estos hechos que recorren a la seccional, porque este camino al gobierno conduce al baradelismo, a la postergación de nuestras demandas, a la no realización regular de su cuerpo de delegados y comisión directiva -cosa que ya está ocurriendo.

La Multicolor viene de protagonizar un plenario de más de 700 compañeros, de llevar adelante un importante paro contra esta miseria salarial y la vuelta a clases sin condiciones sanitarias. Denuncia la precarización laboral docente de los ATR y Piedas, reclamando un subsidio para todos estos compañeros. Este es el camino que llamamos a defender a todos los docentes; al tiempo que llamamos a retomar a los compañeros de la Azul y Blanca un campo de independencia política del sindicato.