El miércoles 9 de mayo se reunió el plenario de delegados de Foetra para discutir la paritaria salarial. Durante ese día y el anterior se realizaron asambleas en decenas de edificios donde se discutió el comunicado de la 'mesa de unidad sindical de las telecomunicaciones' que hacía referencia a un 31,5% de aumento. Como planteamos en un comunicado y en el Boletín de la Naranja repartido los días previos y en el plenario, la directiva ha comenzado a licuar el reclamo del 35% con un 31,5% al que seguramente las patronales contraofertarán cuatro o cinco puntos por debajo.

Efectivamente, antes de que bajen el porcentaje las patronales, la mesa arrancó el plenario informando que del 31,5% habría que descontar un 2% para un 'fondo solidario' para la creación de una 'clínica de diagnóstico y tratamiento' de los jubilados telefónicos. También habría que restar otro 1% para recategorizaciones, con lo cual ya nos vamos cayendo al 28,5%.

En el plenario de delegados se realizó una moción de que la situación de los jubilados sea discutida aparte de la paritaria, ya que el plenario no había sido convocado con ese temario ni había mandato de las asambleas realizadas. La moción, debidamente apoyada por varios delegados, no fue puesta a votación por la mesa.

Las asambleas, allí donde realmente se realizaron, reflejaron mandatos casi unánimes: que el aumento vaya todo al básico y sin cuotas, la necesidad de un aumento del 35% real, que se realice una nueva discusión en caso de inflación (revisión de la paritaria a los seis meses) y que las empresas se hagan cargo del impuesto al salario, entre otras reivindicaciones como las recategorizaciones.La mesa planteó que había que ser responsables y que las paritarias se venían dando sin conflicto y, lo más significativo políticamente, en alineamiento incondicional cristinista que dejó atrás el otrora fervor moyanista de Iadarola y Marín. También se evitó todo debate en el plenario sobre la 'expropiación parcial' de YPF y sobre la crisis más general de las privatizadas, no fuera que se abriera un debate sobre la renacionalización de las empresas telefónicas y un control sobre sus fabulosas ganancias, tema planteado por varios delegados.

Según el comunicado oficial del sindicato, 169 delegados votaron a favor de la propuesta de la mesa y 21 en contra. Se ignoró la moción de separar la cuestión jubilados y se falseó la realidad, puesto que el 30% del plenario votó la moción del 35%. Arrancamos con un manijazo para disciplinar al gremio a los topes de Cristina. Reforcemos el proceso por abajo, la discusión recién empieza.