Sindicales

21/8/2003|814

Tiembla la pandilla de Pedraza

La Celeste del Roca crece

Las elecciones del cuerpo de delegados comienzan a concitar un debate que recorre toda la línea Roca. Se eligen 24 representantes entre los 1.500 ferroviarios empadronados, aproximadamente.


Las amenazas de los delegados verdes (burocracia) a la candidata boletera de la Lista 2 Celeste (clasista) operaron como un búmeran contra la burocracia, que reaccionó negando los hechos, para luego admitirlos parcialmente en forma vergonzante. La indignación de los compañeros le está valiendo a la Verde una tendencia creciente al voto celeste en boletería. Un grupo de compañeros del sector le pidió a un candidato verde que renuncie a la lista oficialista.


La edición del programa de la Celeste fue otro duro golpe para la camarilla de “delegados” verde, que no puede proponer nada luego de 8 años de servilismo a la patronal de Taselli y Montoto. El programa celeste presenta a la lista como “independiente de los intereses de los concesionarios y el Estado”; y reivindica el método de la asamblea general “para la elección de paritarios y toda otra decisión de trascendencia”.


Crecen las reuniones fuera de la línea con “socios” de diferentes especialidades interesados en conocer la propuesta celeste. Compañeros de Vías y Obras, Señalamiento y Cambistas, se suman a repartir los folletos. Entre los auxiliares y guardatrenes, oímos elogios al programa. Entre los guardabarreras, crece el voto anti-verde como repudio al “delegado” Zárate, quien jamás recorrió la línea para organizar a su especialidad.


En Limpieza comienza un debate con los compañeros, casi la totalidad de los cuales fueron transferidos a la empresa hace un año; a pesar de que la burocracia quiso capitalizar esto como una conquista propia, la Lista Celeste denuncia que fueron incorporados a una nueva categoría creada por debajo de la última del convenio anterior y con un básico miserable de 208 pesos. La falta de elementos de trabajo y de protección, junto con el instinto obrero para oler a los delegados burocráticos, suma para que la Celeste también esté creciendo en el apoyo de la especialidad.


Depósito de Llavallol sigue siendo el sector más verde (60 compañeros), gracias a una reciente recategorización del personal, con discriminaciones, 8 años de demora e inconfundible tufillo electoral; pero en los ta lleres de Escalada (300) la ola celeste, que crece en torno del candidato a delegado y un grupo de jóvenes activistas, alarmó a la burocracia. Debido a que el “delegado” verde del taller, Tovagliaro, está re quemado, tuvo que bajar el secretario general de la Seccional Gran Buenos Aires Sur, Brancatti, a prometer allí también recategorizaciones a diestra y siniestra para quienes se afiliaran al sindicato.


Nunca hubo recategorizaciones en Escalada desde la concesión de la línea a Metropolitano. Sin embargo, los compañeros ya extraen las primeras conclusiones: son conquistas que le debemos a la Celeste por el temor de la burocracia y la empresa ante la posibilidad de una derrota verde.


Las recategorizaciones son el anteúltimo intento de la patronal y la burocracia de impedir que se siga expandiendo como mancha de aceite la tendencia al voto celeste. El último puede ser el fraude electoral. Por eso: a reforzar el final de campaña.


• Decenas de fiscales y voluntarios para garantizar la transparencia de la jornada del 2 de setiembre.


• Decenas de pintadas celestes en los paredones de todo el Roca.


• Por un cuerpo de delegados independiente y democrático. Fuera Pedraza y toda la burocracia de la Unión Ferroviaria.