Sindicales

17/10/2013|1290

Todos con los trabajadores de Emfer y Tatsa

El grupo Cirigliano ha redoblado su ataque a los puestos de trabajo y conquistas de Emfer y Tatsa, desde que perdió la concesión de TBA, las dos empresas de su propiedad funcionan en el predio de Migueletes y están dedicadas a la reparación de vagones ferroviarios la primera, y a la producción de carrocerías de colectivos, la segunda.


La lucha de los trabajadores de Emfer ha frenado intentos de despidos, retraso en el pago de salarios, entre otros ataques. Los Cirigliano se han lanzado a vencer al activismo y a la comisión gremial interna para avanzar en su planes de desguace.


En función de ello, han lanzado una batería de denuncias penales y pedidos de desafuero contra el cuerpo de delegados. Se trata de una revancha patronal debido a que los trabajadores sacaron a la luz la quema de documentación vinculada con las masacres ferroviarias, por parte de Cirigliano, complicando judicialmente a este grupo empresario.


En Tatsa, el estado de vaciamiento es avanzado, prácticamente no se están produciendo nuevas unidades. Tras el traspaso de algunos trabajadores a Emfer, la empresa realizó trece despidos, apretando con indemnizaciones inmediatas.


Los trabajadores de Tatsa han realizado permanencias en la fábrica y cortes de la General Paz. El Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria con los despedidos adentro, pero con una negativa a su cumplimiento por parte de los Cirigliano luego de vencida, elemento que deja en claro que la lucha seguirá en pie.


Que la crisis la paguen los capitalistas


La crisis del "modelo" de privatizadas, concesiones y subsidios -en este caso, en la industria ferroviaria- intenta ser descargada sobre los trabajadores, de la mano de uno de los grupos más beneficiados con subsidios millonarios durante la "década ganada".


Los trabajadores de Emfer y Tatsa han lanzado una campaña pública contra el ataque a su organización y es tarea de todo el activismo y los luchadores apoyar con toda la fuerza esta pelea. En lo inmediato, la unidad de los trabajadores de las dos plantas es una clave para enfrentar a esta patronal. Cada día se presenta con más claridad el problema de la nacionalización del conjunto del sistema ferroviario y de transporte bajo control de los trabajadores. Tatsa y Emfer se inscriben en esta perspectiva.


• Reincorporación definitiva de los trece despedidos de Tatsa.


• Abajo el desafuero y las causas penales contra los delegados de Emfer.


• Que la UOM llame a un plenario general para votar un plan de apoyo a la lucha.


•Castigo a los responsables de la masacre de Once y Castelar.