Sindicales

21/5/2018

Trabajadores de Criave en lucha por el pago de salarios

La principal industria de la localidad bonaerense de Roque Pérez, Criave, emplea alrededor de 700 trabajadores enrolados en el Sindicato de Alimentación su mayoría y otro grupo en el Sindicato Molinero. Del grupo empresarial forma parte la familia Perea, dueña de Ovoprot y recientemente desplazada de la gestión de Cresta Roja. 


Si bien hace más de dos años que la empresa viene pagando los salarios en cuotas, el conflicto se agravó el sábado cuando no apareció el dinero comprometido para cubrir el salario de abril. Los trabajadores definieron un paro total de actividades con bloqueos a los ingresos y un acampe permanente. Los empresarios se dieron a la fuga y anunciaron un posible cierre, lo que es a todas luces una extorsión.


La principal interpretación que se ha volcado entre los trabajadores es que la empresa apunta a reclamar un subsidio similar al obtenido recientemente por Granja Tres Arroyos al hacerse cargo de la gestión de Cresta Roja. La familia Perea seguiría así su ruta de “subsidiaria serial” del gobierno de Macri. Pero quien conozca a los dueños de Criave debe saber que los puestos de trabajo están realmente en peligro. Si dejaron a los miles de Cresta Roja en la calle, no dudarán en deshacerse de los 700 de Criave. No se trata solamente de una crisis para conseguir los subsidios: se trata de una crisis de conjunto.

El conflicto de Criave no es un rayo en cielo sereno. Todas las plantas avícolas están en situación de crisis, principalmente las de Cresta Roja. Como denunciamos hace varios meses desde la Naranja de la Alimentación, el plan de la Cámara empresaria avícola era reducir en un 15% la producción de pollos porque el sobre abastecimiento les impedía subir los precios. Esta reducción también impacta en el enfriamiento de una paritaria avícola que no se cierra pero que tampoco se mueve del 15%. 


Es necesario un Plenario de Delegados del STIA que discuta un plan de lucha un plan de lucha por las paritarias, por la defensa de los puestos de trabajo y contra la reforma laboral. Hay que unir a los trabajadores de la alimentación detrás de esta lucha.

Al cierre de esta edición se estará realizando una asamblea entre los trabajadores, ante el anuncio del dictamen de la conciliación obligatoria de parte del Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires.