Sindicales

26/7/2020

Trabajadores de la educación de Mendoza debatieron en reunión de Tribuna Docente

Se debatió sobre la vuelta a clases y el teletrabajo y se resolvió promover un plenario provincial de base del gremio.

Este sábado 25, convocada por Tribuna Docente-Lista Rosa del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Mendoza (Sute), se realizó una importante reunión con trabajadores y trabajadores del sector de numerosos puntos de la provincia, de la educación de nivel inicial, secundaria y superior; especial, y técnica; en contexto de encierro; de colegios de la universidad; de los Centros de Educación Básica de Jóvenes y Adultos; celadorxs. Estuvieron presentes representantes de Sute, entre ellas la secretaria provincial de la seccional Las Heras, la compañera Gabriela Lugones, del secretariado general y de la seccional Luján de Cuyo.

El encuentro fue rico en debates e informes de cómo se está viviendo en cada sector el retorno a clases para el segundo período, atendiendo la situación de las distintas unidades educativas y de las y los compañeros y compañeras que se desenvuelven en cada una de ellas. Se señaló en todos los informes cómo la Dirección General de Escuelas (DGE) ha descargado toda la responsabilidad del funcionamiento de la educación en los trabajadores/as, que para sostenerla ponen obligadamente recursos personales a disposición del organismo -y en caso de no poder hacerlo, se ven amenazados con descuentos y el ítem aula. Se discutió que no existe plan alguno para paliar la falta de conectividad y herramientas tecnológicas para docentes y estudiantes que, con la crisis económica, están haciendo crecer aún más una deserción que ya viene desde hace años, por más que se esfuercen en negarlo con encuestas truchas.

El debate a fondo sobre el teletrabajo fue concluyente de cómo ha significado una flexibilización ilimitada de las jornadas laborales. Se marcó que no existe el menor marco regulatorio para esta educación a distancia y que se busca ir más a fondo en este sentido buscando aplicar una doble modalidad, y profundizando las reformas educativas que se vienen intentando introducir desde gobiernos anteriores.

Por su parte los celadores/as, quienes garantizan las condiciones de las escuelas, pusieron en debate que los recursos con los que hoy cuentan solo podrían alcanzar para dos días con el protocolo de limpieza de las escuelas, y los elementos de seguridad brillan por su ausencia. Vale recordar también que sus magros salarios los obligan a salir a hacer changas extra para poder garantizar las mínimas condiciones de vida de ellos y sus familias.

En estas condiciones es evidente para toda la comunidad educativa (aunque no lo es para el gobierno), que es imposible el hipotético retorno a las clases presenciales, porque solo significa una exposición de nuestra salud -en muchos casos, sobre quienes pertenecen a grupos de riesgo- y una sobrecarga laboral obligatoria que no es remunerada. Por el contrario, a medida que crecen los casos de Covid-19 en el pueblo, crece también la preocupación de las y los educadores que están totalmente comprometidos con el hambre y la desprotección de la comunidad a la que pertenecen, y que son responsabilidad del Estado.

Preparemos un segundo round

La conclusión de todos los debates que se presentaron es que resulta necesario fortalecer los lazos de unidad entre todas y todos. Por eso, se planteó la necesidad de la convocatoria a un plenario de base que convoque sin exclusiones a trabajadores de la educación de toda la provincia, y con esa fuerza colocar en la agenda pública los reclamos más urgentes, para que se priorice la educación del pueblo y no el pago usurero de una deuda impagable que se contrajo para los negociados de una minoría.

Se resolvió también participar de una charla debate sobre el teletrabajo convocada por la diputada nacional Romina del Plá e iniciar una campaña de de apoyo en Mendoza por la aprobación del proyecto de impuesto a las grandes fortunas que presentó la compañera, para que esos recursos sean aplicados a educación, salud y las necesidades más apremiantes de la población trabajadora.

Impulsemos acciones, utilizando la virtualidad, convocando a la creatividad (que la docencia ya ha demostrado con maestría para llevar adelante su trabajo) para visualizar nuestros reclamos y construir un plenario de base de todos los/as trabajadores/as de la educación, y poder fortalecer la unidad del colectivo.
Porque nosotros y nosotras no nos bajamos de los reclamos.

Vamos por un aumento de emergencia del 40%, la apertura de paritarias, el llamado a suplencias para todos los cargos vacantes, un ítem conectividad para paliar todos los gastos que salen de recursos propios, la entrega inmediata de los elementos de seguridad las y los celadores, y todos las reivindicaciones para el funcionamiento y la dignidad de la tarea educativa.