Sindicales

25/8/2020

Trabajadores de reparto: rechazamos la mesa de diálogo con la Bonaerense

Por una mesa paritaria entre trabajadores, empresas y Ministerio de Trabajo.

Agrupación de Trabajadores de Reparto

El pasado lunes 24 se realizó una jornada de lucha a 24 horas de que un trabajador de reparto de la ciudad de La Plata recibiera un tiro en su pie en plena jornada laboral. Esta jornada arrancó con una concentración en la Plaza Moreno y luego avanzó hasta la Gobernación. En la misma participaron trabajadores de apps y también la burocracia de Acri (Asociación Civil de Repartidores Independientes), la firmante del acuerdo entre las empresas y la policía para poner de vigilantes a los trabajadores de reparto.

Desde la Agrupación de Trabajadores de Reparto (ATR) participamos denunciando la complicidad policial con el delito organizado y exigiendo a las empresas y al Estado las garantías laborales para poder desarrollar la tarea de reparto. Exigimos cobertura médica, seguros contra robos y de vida y poder rechazar pedidos sin sanciones.

Sobre el final de la jornada hubo un choque entre trabajadores y Acri. En el momento de la desconcentración un miembro de la burocracia de Acri, amparada en sus relaciones con los funcionarios, chocó con su moto a un trabajador de reparto y a la moto de éste, no solo lastimándolo sino rompiéndole la herramienta de trabajo. Este accionar, propio de la burocracia, que rechazamos y repudiamos, deja de manifiesto que hay que seguir organizándonos de forma independiente.

Finalmente, desde la Gobernación propusieron una mesa de negociación para el mismo día a las 16 horas. Pero el problema es que la mesa de negociación no sería con las empresas que deben garantizar las condiciones de trabajo, ni tampoco con los funcionarios del Ministerio de Trabajo con los cuales debemos discutir el reconocimiento laboral, sino que sería ni más ni menos que con la policía bonaerense: la responsable de desaparecer a Facundo Castro y de perpetuar un caso de gatillo fácil cada 40 horas.

Rechazamos la respuesta del gobierno de armar una mesa de diálogo con el comando de patrullas para organizar operativos. Esto es una maniobra para lavarle las manos a las empresas y también las propias sobre la responsabilidad del reconocimiento laboral por el cual los trabajadores de reparto nos venimos movilizando desde el inicio de la cuarentena.

En Pilar, sobre la base de la movilización independiente de trabajadores de reparto, le arrancaron al municipio el pago del GPS. Esto significa un pequeño paso en la lucha que tenemos por delante.

Llamamos a una gran movilización en La Plata y en todo el país este 31 de agosto para exigir al Estado y a las empresas nuestros derechos laborales más urgentes: basta de complicidad policial con el delito; basta de zonas liberadas; seguro contra robo y accidentes a cargo de las empresas; rechazo de pedidos sin sanciones; por el reconocimiento de la relación laboral y por una regulación discutida por y para los trabajadores de reparto. Fuera la burocracia sindical.