El jueves 21 se realizaron las elecciones de Junta Interna ATE del Hospital Eva Perón de Grranadero Baigorria, en las cuales se impuso nuevamente nuestra lista Naranja con el 52% de los votos, representada por compañeros de Tribuna Estatal e independientes, sobre la Lista Bordo-Verde –una coalición entre la Lista Verde (Cachorro Godoy), que dirige ATE-Rosario, y la Bordó (un sector del PJ de Baigorria-Rosario).

La Dirección Verde del Sindicato y su Junta Electoral prestaron su aparato para intentar desplazarnos de la conducción de la Junta Interna a través de innumerables maniobras fraudulentas, que tuvieron su punto más alto en la proscripción de más de una treintena de compañeros para la elección. Entre ellos, enfermeros, compañeros de Servicios Generales y administrativos, afiliados por nosotros, y que venían de protagonizar importantes luchas y procesos de movilización por el pase a planta y la faltante de personal. Completaron esta maniobra con la inclusión fuera de término de afiliados al padrón, algunos de ellos sin siquiera estar enterados, lo cual denunciamos ante el Ministerio de Trabajo.

Montaron un fraude electoral, que sumado a su política de ofrecimiento de prebendas, de acuerdos con fracciones del PJ local, y de una fuerte campaña macartista y reaccionaria, les permitiría, según sus cálculos milimétricos, obtener el triunfo electoral. Nosotros, en cambio, fuimos a disputar y conquistar el voto de su propio padrón sobre la base de la explicación y del debate con cada compañero.

Los compañeros proscriptos de la elección tuvieron una participación activa denunciando el fraude, defendiendo la democracia sindical, llamando a defender a la Junta Interna que se mantuvo consecuentemente del lado de los intereses de los trabajadores; que organizó las Asambleas y las movilizaciones por los diferentes reclamos y que organizó los paros provinciales y nacionales contra el robo a los jubilados frente a la ausencia absoluta de los Verde-Bordó y la parálisis de la UPCN.

La victoria de la Naranja va a servir para reforzar la organización de los compañeros y avanzar en la unidad de acción, en la organización de la lucha, frente a la Reforma Laboral, a la “armonización” de la caja jubilatoria de la provincia y en defensa del salario y la salud pública.

La descomposición política de la Verde, que pasó del “frente antimacrista” al frente contra la Naranja clasista y utiliza el fraude electoral y ha formado un frente totalmente oportunista con la Bordó plantea que se abra un debate dentro del activismo del gremio para recuperar el sindicato para una política clasista, de lucha consecuente y de independencia política de los trabajadores. La Naranja está comprometida en esta tarea.