Sindicales

16/12/2010|1159

UTA Córdoba – Trolebuses: la conducción desconoce la asamblea general

En Tamse no aparece

Ante la destrucción de la flota y con ella el acelerado deterioro de las condiciones de trabajo, los trabajadores de Tamse-troles garantizaron un aguerrido paro el lunes 29 de noviembre.

La Ortuta venía preparando las condiciones para la lucha de los troles al denunciar en sus últimos boletines las condiciones letales en las que se viene trabajando, también hizo firmar un petitorio dirigido al intendente, que suscribió más de la mitad del personal. Cuando la decisión de ir a la lucha estaba madura, los delegados ligados al gremio y la conducción de Peñaloza tuvieron que convocar a una asamblea, a la que los trabajadores transformaron en un paro total.

En la primera negociación que se tuvo con la Municipalidad, la oferta fue la entrega de 25 millones de pesos para comprar once trolebuses, sin fecha de desembolso. Esos fondos estaban destinados anteriormente a renovar parte de la flota de colectivos de Tamse. Si bien las delegadas querían firmar, las compañeras que estaban en la negociación exigieron que sean las bases quienes tomen la decisión.

La negativa de la asamblea fue rotunda. Se exigieron 30 coches y que la plata salga del Fondo de Mejora del Transporte (impuesto al boleto que pagan los usuarios y que es desviado a rentas generales) y no del aumento del cospel como pretendía Peñaloza.

Desconociendo abiertamente lo resuelto en asamblea, apareció Peñaloza con la misma acta que había sido rechazada, firmada entre Giacomino y el gremio, en una negociación a espaldas de los trabajadores. Esto no sólo le valió el repudio generalizado de toda la asamblea sino que, además, tuvo que retirarse de la empresa. A partir de ese momento, la asamblea se enrareció y termino levantándose.

El paro ha sido el camino para resolver la situación de la empresa. La forma de negociación que se estableció al principio es la más efectiva para unir y fortalecer a los trabajadores. La conducción de Peñaloza y las delegadas no quieren ni la una ni la otra. Están alineados con el gobierno de Giacomino.

El paro del Trole no es un rayo en cielo sereno. Una asamblea de la punta de línea de Belardinelli sacó a la luz la misma tendencia en Tamse, a raíz del reclamo de una vieja deuda que se tiene con un sector de los trabajadores (ítems salariales) y el incumplimiento de actas sobre mejoras en condiciones de trabajo. La conducción aquí ni siquiera apareció.

Vamos por la asamblea general de trolebuses y de Tamse para garantizar la respuesta a los reclamos de los trabajadores. De esa forma, unificaremos los reclamos de todos los compañeros. Por una comisión de trabajadores de toda la empresa, elegida en asamblea, para frenar su vaciamiento. Así preparemos el terreno para intervenir en las paritarias.