Sindicales

10/7/2008|1045

TUCUMAN

Atep: Gran votación de la oposición combativa

Quebramos el fraude y conquistamos la minoría

apoderado de la Lista multicolor y Congresal Nacional a Ctera

El domingo 29 se desarrollaron las elecciones de Atep (sindicato docente) en medio de un proceso claramente fraudulento. La Lista Roja-Turquesa-Rosa había logrado sortear las innumerables trabas que le había puesto la Junta Electoral, incluida la propia proscripción. Con sólo 24 horas de campaña, conquistamos más del 25% de los votos y la minoría. Una gran victoria política que vino precedida de una seguidilla de victorias contra las maniobras burocráticas más inauditas.

La Junta Electoral de Zelarayán había tirado abajo nuestra lista y a otra lista, burocrática, surgida de la división de su propio aparato, en los primeros días de mayo con argumentos falaces. Apelamos en el Ministerio de Trabajo de la Nación y desarrollamos una intensa campaña de repudio a la proscripción. A sólo nueve días de los comicios, el Ministerio resolvió que participáramos pero sin volver el proceso atrás; la Junta mantuvo las elecciones el 29.

La Junta nos presentó nuevos escollos; los superamos y logramos la oficialización el viernes 27, a las 22 horas. El sábado al mediodía recién nos oficializaron el voto testigo y nos dieron las credenciales de fiscales el sábado a las 23:45 horas. El domingo a las 8 horas teníamos que fiscalizar escuelas a más de 200 kilómetros de la capital.

En medio de la Cumbre del Mercosur y de la confusión por un proceso electoral fuertemente viciado, sólo votó el 25% del padrón. Zelarayán movilizó todo su aparato pero no pudo dejarnos afuera del congreso, que era el objetivo del fraude que montó el propio domingo. Conquistamos 20 congresales, tres congresales jubilados y dos congresales nacionales a Ctera.

La elección de Atep fue una clara demostración de los métodos con los que dirige la burocracia cterista sus sindicatos, que en nada difieren de los métodos de los “gordos” de la CGT. Fue también una constatación de su derrumbe imparable y de su falta de arraigo en la base docente.

Puso de manifiesto las potencialidades de un frente único de la oposición, que unió a distintos sectores combativos atomizados con un programa claro de recuperación gremial y de lucha.

La Lista Roja-Turquesa-Rosa ha cumplido un claro papel y se ha transformado en un canal para que un sector del activismo docente pueda expresarse en medio de la atomización gremial y conducciones que frenan cualquier iniciativa de lucha.