Sindicales

17/2/2011|1165

Fate: en defensa de los delegados y el salario

La patronal de Fate, que encabeza el golpe de Estado pro-kirchnerista en la UIA, logró que los oligárquicos tribunales de San Isidro resuelvan “exclusión de la garantía sindical para proceder al despido” de Víctor Ottoboni, delegado obrero. Como en casos anteriores, la acusación se basa en legítimas medidas del accionar sindical. El fallo queda como una espada de damócles, mientras se procesan las apelaciones.

No se trata de un hecho aislado. Pretenden una derrota en la antesala de las discusiones paritarias, en particular, en una empresa donde rigen precarias condiciones de trabajo y donde el último acuerdo salarial del neumático cerró con más de 10% por debajo del reclamo inicial, luego de un plebiscito trucho impulsado por la burocracia de Pedro Watseijo.

El alineamiento del Sutna con Yasky y el gobierno le cuesta caro a los trabajadores de Fate. La experiencia indica que no es suficiente exigirle a la burocracia que se ponga a la cabeza de los reclamos de los trabajadores, está planteada un accionar independiente del cuerpo de delegados fabril y de la seccional opositora de San Fernando.

La lucha contra la persecución sindical tiene que estar incorporada al conjunto de los reclamos salariales y de condiciones de trabajo que están planteados en Fate. Preparemos en esta etapa una asamblea general de fábrica que discuta luchar por Ottoboni hasta el levantamiento del juicio y por un pliego paritario propio, que fije el piso salarial tomando la ruta de los aceiteros que arrancaron cinco mil de mínimo, actualización según inflación, y coloque en la mesa la reversión del robo patronal de los turnos americanos, que para eso están las paritarias, no solamente para el salario.