Sindicales

16/10/2021

Metalúrgicos

UOM: una paritaria muy dilatada

Delegado Siderca

La UOM cerró este miércoles 9 un acuerdo con las cámaras de la actividad que establece un incremento del 5% en los básicos “respecto a los salarios de marzo 2021” para enero, febrero y marzo de 2022. Esto englobaría un 50,2%, supuestamente de la paritaria 2021. Así mismo el IMGR (índice mínimo global de referencia) se incrementará en los mismos porcentajes, según informaron los voceros del gremio.

El aumento real

En realidad, si cada aumento mensual del 5% para el primer trimestre de 2022 fuera sobre los salarios de marzo como fue anunciado, estamos hablando de un incremento bastante menor al 35% cerrado en varias cuotas para la paritaria 2021. Recordemos que en 2020 no tuvimos paritarias, con la excusa de que en pandemia había que colaborar con las empresas y el gobierno para pasar la crisis sanitaria. A cambio recibimos un bono, también en cuotas, que pretendió ser vendido como paritaria de ese año.

Con el 35% (siempre en cuotas) todavía sin terminar de pagarse, la cláusula de revisión fue menospreciada por el secretario general de la UOM, Antonio Caló, hace apenas un mes, porque según sus palabras “todavía estábamos bien”, cuando la inflación ya había superado ese porcentaje y la proyección de gobierno, aceptada sin chistar por la UOM, iba a ser casi duplicada en diciembre.

La dirección de UOM es la nave insignia de las paritarias a la baja: es uno de los primeros gremios en cerrar acuerdo con las patronales cuando estas inician, y cierran apenas uno o dos puntos sobre la pauta oficial para posar de buen negociador. Le marca la cancha al resto de los gremios que toman como referencia al que podría ser el más poderoso por contar con un ejército de afiliados que puede hacer temblar a Rocca o a Castro, si tuviera una propuesta de organización y lucha por parte de esa dirección.

Caló el empresario

La UOM estuvo con la representación de Caló mismo en el Congreso Industrial, ratificando su orientación patronal y su aval a las reformas laborales que proponen Toyota o Techint con la excusa de sostener las fuentes de trabajo, cuando en realidad se precarizan y se pierden puestos con estas políticas. El eslogan patronal “producción, desarrollo y trabajo”, que esgrimió el dirigente junto con la cúpula de la CGT, le pone sello a esa orientación.

Oficialista siempre: “si banqué a Macri como no voy a bancar a Alberto”, el secretario general metalúrgico defiende y responde a los intereses de los industriales.

El salario y la reforma

Con la pandemia las empresas se desataron avanzando con reformas de hecho y ataques al salario, los casos de Toyota y Techint son testigos. En el caso de UOM, tiene como un factor de achatamiento salarial el IMGR, que le pone un límite al ingreso de quienes sobre todo cobran solo básico y categorías más bajas. Toyota junto con Smata acaban de extorsionar a los trabajadores con un acuerdo que incrementa la explotación absoluta.

La paritaria con la metodología UOM ha dejado de ser un mecanismo de actualización salarial y ha dejado de contener el año calendario con los aumentos. Los constantes arreglos en cuotas y fuera del año que se debe actualizar convierten la paritaria en meros bonos compensatorios que no defienden ni mucho menos mejoran el poder adquisitivo de los y las metalúrgicas.

La contracara es el gremio del neumático, que con los métodos del clasismo -la organización, la movilización y la lucha- ha conseguido homogeneizar el salario de los trabajadores de todo el gremio, combatiendo los despidos y las reformas laborales.

En tiempos de elecciones sindicales y generales, los y las metalúrgicas debemos evaluar las experiencias con esta conducción que valida la flexibilización, los despidos, los contratos basura y que no enfrenta a las patronales que las impulsan.

Para que se impongan los métodos del clasismo, es necesario recuperar los sindicatos, que vuelvan las asambleas y los congresos de delegados, pero también abrir el debate político con cada trabajador que aún no ha identificado la relación y dependencia de estas dirigencias con las distintas variantes de gobierno que hoy se siguen disputando su voto en ambos frentes.